El 18% de los niños menores de 5 años en los bateyes tiene desnutrición crónica, de acuerdo con la Encuesta Sociodemográfica y sobre VIH/Sida en los bateyes estatales de la República Dominicana.

Para la tercera parte de los niños con desnutrición crónica el retardo en el crecimiento es de carácter severo. En el resto del país, la desnutrición crónica es de un 10%.

Según la investigación, la desnutrición aguda, medida por bajo peso para la talla, es de 3% en los bateyes estatales.

La desnutrición global, medida según el peso para edad, es más del doble  que la registrada en el resto del país: 7% de los niños menores de 5 años presentan bajo peso para la edad. Una tercera parte de ellos es de carácter severo.

La proporción de infantes con desnutrición crónica y aguda es mayor entre los varones. El 14% de las niñas presentó desnutrición crónica, mientras para los niños fue de un 22%. La desnutrición global es  doble en los niños que entre las niñas (10 y 5%).

El estudio fue realizado por el Centro de Estudios Sociales y Demográficos (CESDEM).

La desnutrición crónica disminuye en forma importante a medida que aumenta la duración entre los embarazos.

La encuesta encontró que la desnutrición crónica disminuye rápidamente con la educación y el nivel socioeconómico.

En cuanto a la educación, la desnutrición disminuye desde el 27% entre los niños de madres sin educación hasta 12% entre las madres con educación secundaria o superior.

Por  otro lado, el estudio encontró que el 62% de los niños menores de dos meses de los bateyes recibe alimentos en biberón, lo cual no es recomendable.

Según la encuesta, el 54% de los niños menores de seis meses es alimentado con leche no maternizada y el 16% recibe complementos alimenticios.

Entre los niños de 20 a 23 meses, el 62% no es lactado y casi la misma proporción (64%) recibe alimentos en biberón.

Tanto para los niños que lactan como para los que no lactan, el consumo de frutas y vegetales ricos en vitamina A es bajo, pues entre los 6 a 23 meses es de 33%.

Uno de cada cuatro niños de 6 a 59 meses recibió suplementos de hierro en los siete días anteriores a la encuesta.

El 78% de los niños menores de 5 años se enfermó con tos y catarro una vez en los doce meses antes de la encuesta.

El 17% de los niños menores de 5 años tuvo fiebre en las dos semanas antes de la encuesta.

El 18% de los niños menores de cinco tuvo episodio de diarrea en las dos semanas antes de aplicación de la encuesta; el 69% fue llevado a un centro de salud.