Alrededor del 30% de los empleados de la Junta Central Electoral (JCE) será cesanteado, como parte de un proyecto que procura racionalizar los gastos de ese organismo.

En la actualidad, la JCE tiene una nómina fija de alrededor de 3,000 empleados, incluidos los funcionarios y demás personal de la sede central, la Junta Electoral del Distrito Nacional y las demás juntas municipales.

Adicional a ellos, tiene un personal fijo diseminado por todas las Oficialías del Estado Civil, una nómina de empleados en trámite de jubilación y de otros que fueron contratados temporalmente para el proceso electoral que culminó el pasado 16 de mayo.

Previo a la adopción de la medida, la Cámara Administrativa recomendó al pleno de la JCE, la ejecución de un estudio que realizó una empresa de auditoría externa, el cual arrojó como resultado que el organismo electoral tiene una estructura que no requiere de tantos empleados.

Sin embargo, se informó que antes de ser separados de sus puestos, todos los empleados serán sometidos a un proceso de evaluación profesional, para determinar quiénes se quedan y quienes no.

La medida se inscribe, además, dentro de un proyecto de robustecimiento de la JCE, orientado al establecimiento de manuales de clasificación de puestos y de procedimientos que faciliten la aplicación de normas administrativas, para determinar el número real de empleados que necesita ese organismo.

Adicional al 30% del personal fijo, también se prescindirá del personal contratado temporalmente.