POR ELIAS RUIZ MATUK
Galván, Baoruco.- Las Fuerzas Armadas, autoridades aduanales y de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) fueron desplegadas ayer aquí en distintos puntos donde se tenía información de que se trafica “arroz norteamericano” procedente de Haití.

El operativo se realizó tras miembros de la división de inteligencia (J-2) ser atacados a tiros y a pedradas por “una turba organizada” de aquí que se cree que cuenta con el apoyo de las autoridades locales. A pesar de que fueron allanados varios almacenes donde los departamentos de inteligencia (J-2) y (G-2) del Ejército habían recibido información de que comercializan el arroz, la búsqueda fue infructuosa. 

Tras el operativo no tener éxito, se creyó que los contrabandistas fueron avisados para que escondieran la mercancía contrabandeada.

Los allanamientos estuvieron encabezados por el mayor general Antonio Jáquez López, director del J-2, así como por el coronel Elvis Almonte (G-2) y el subdirector del J-2, coronel Andrés Santos Melo.

 También, por el supervisor general de Aduanas, Radhamés Rosado y el fiscalizador del juzgado de paz del municipio, Wander Jiménez de León.

El sábado pasado, cuando miembros de las autoridades aduanales, del J-2 y de la misma Fiscalía hacían un operativo similar fueron atacados a tiros y a pedradas.

Además, una turba de unos cien motoristas llegaron a la casa sin número de la calle Cambronal del barrio Amor y Paz, donde los militares trataban de allanar y requisar un cargamento de arroz que alegadamente se encontraba allí.

La casa es propiedad de Rogelio Montilla (Wïnston), según pudieron constatar las autoridades  y en el lugar estuvo, además, el vicesíndico de este municipio Santos Canario Florentino (PRSC), quien, armado, se hizo acompañar de unas diez personas que cuestionaron las acciones de los militares y la orden de quien los mandó a realizar el allanamiento. Los militares pidieron el arma de fuego al funcionario municipal, a lo que éste se resistía alegando que sólo se la entregaba al señor Amable Aristy, secretario general de la Liga Municipal Dominicana (LMD).

Fue por ello que los miembros del J-2  se vieron obligados a despojarlo de su arma y luego se la entregaron a la Policía de la localidad.

Tras allanar la casa en cuestión fueron encontrados 448 sacos de arroz y habichuelas y las autoridades aduanales, encabezadas por Pedro Antonio Ferreras y Jiménez de León, hicieron gestiones para transportarlos a la ciudad.

Sin embargo,  se vieron confrontados por una turba que se lo impedía, por lo que los militares tuvieron que recurrir a  hacer disparos al aire para dispersar el amotinamiento frente a la vivienda. Posteriormente, cuando todo parecía haberse calmado, se empezaron a escuchar disparos en los alrededores y les fue lanzada una bomba lacrimógena a los militares, así como varias piedras.

Sérgida Sánchez, una de las vecinas del lugar, contó a reporteros de HOY que al momento de ocurrir el hecho se encerró en su casa junto a cuatro nietos que cuida, escondiéndose de los disparos, pedradas y bombas lacrimógenas que escuchó.

La casa en cuestión, tiene un impacto de bala, según pudo contactar este reportero.

La mujer afirmó que los militares dispararon al aire a fin de poder dispersar a los atacantes.

La acción fue atribuida, además, a las autoridades municipales  encabezadas la síndico Jacqueline Núñez (PRD) y al vicesíndico del municipio de Galván por el PRSC, Santos Canario Florentino.

Entre los negocios que fueron allanados ayer por las autoridades se encuentran Almacenes Glennys, de la señora Glennys de León: Centro de Negocios Nelson Cruz; Casa Los Tres Hermanos, así como los mismos lugares que fueron allanados el pasado sábado.