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El ministro de Agricultura, Luis Ramón Rodríguez, destacó la fortaleza del sector arrocero dominicano, que en los últimos 10 años se ha mantenido produciendo entre once y doce millones de quintales del cereal, suficientes para atender la demanda de la población.
El ministro Rodríguez explicó que el país ha avanzado mucho en preparación de tierra para la siembra de arroz, por lo que se espera para comienzo de abril una producción de entre 5.5 y 6 millones de quintales del alimento.
Explicó que la tendencia alcista en los precios de arroz a nivel internacional, ha disminuido la brecha con los de producción local.
En los mercados internacionales hemos visto la tendencia del arroz hacia el incremento de precios, lo que hace que la diferencia de precios de la producción local y de la producción a nivel internacional sea cada vez más pequeña manifestó.
Dijo que en el 2012, el país otorgó permiso para importar 14 mil 480 toneladas métricas de arroz dentro del Tratado de Libre Comercio (DR-Cafta), pero que de ese volumen solo van a entrar cerca de mil toneladas.
Sostuvo que la importación de esas mil toneladas de arroz no constituye ningún peligro para la producción nacional, ya que la población consume 950 mil quintales del cereal al mes.
Explicó que no hay ninguna preocupación de parte de los productores por la importación del arroz que representa el compromiso de Estado con el DR-Cafta.
Respecto a la calidad del arroz, Rodríguez dijo que la producción nacional es superior a la del importado, porque el criollo es fresco y no viene de silos, como el extranjero.
Los consumidores dominicanos se han acostumbrados a comer arroz de alta calidad, contrario al importado que para salir del hay que mezclarlo con el de producción local, aseguró.
La pignoración. El ministro Rodríguez manifestó que el Programa Nacional de Pignoración ha sido importante para el fortalecimiento de la producción arrocera porque crea seguridad en su comercialización.
El funcionario dijo que para el Presupuesto de 2013 el presidente Danilo Medina ha conferido 850 millones de pesos para que el Ministerio de Agricultura rediseñe el Programa Nacional de Pignoraciones para beneficio de los productores, procesadores y consumidores.
