Destituyen gobernador ucraniano tras protestas por llegada de dominicanos y otros evacuados de Wuhan

Destituyen gobernador ucraniano tras protestas por llegada de dominicanos y otros evacuados de Wuhan

Evacuados de Wuhan/Fuente externa

El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, destituyó este sábado al gobernador de Ternópol, Ígor Sópel, tras las protestas en esa región contra la recepción de evacuados de la ciudad china de Wuhan, epicentro del brote de COVID-19, la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.

Según explica la Presidencia ucraniana en un comunicado, se tomó esta decisión debido a “la situación creada en la región de Ternópol por la evacuación de ciudadanos ucranianos de China y la deficiente labor de la administración regional para informar a la población sobre la seguridad epidemiológica».

Señala que Sópel, que asumió el cargo en octubre pasado, fue destituido a petición propia. El pasado día 18, cientos de personas se congregaron en la localidad de Mikunlintsi, en la región de Ternópol, para protestar contra la decisión de la autoridades de ingresar allí a quienes iban a ser evacuados de China.

Zelenski denunció que las manifestaciones tenían un trasfondo político y obligaron al Gobierno a instalar a los evacuados, que llegaron a Ucrania el pasado jueves, en un centro médico de la Guardia Nacional en la región de Járkov.

Aun así, los autobuses con los evacuados -45 ucranianos y 27 extranjeros, casi en su totalidad latinoamericanos- fueron recibido con barricadas y pedradas por los vecinos de Novye Sanzhari, una localidad próxima al centro médico, lo que obligó a intervenir a la policía antidisturbios. Con el fin de tranquilizar a la población, la ministra de Sanidad de Ucrania, Zoriana Skalétskaya, se sumó a la cuarentena de los evacuados de Wuhan.

“Pasaré con ellos los próximos catorce días en la mismas instalaciones, en las mismas condiciones. Confío en que mi presencia calme a la gente de Novye Sanzhari y de otros lugares del país”, escribió Skalétskaya en la red social Facebook al anunciar su decisión.

El Gobierno ha asegurado que los evacuados de Whuhan, así como los tripulantes del avión que los trasladó de China y los médicos que los acompañaron en el vuelo, se encuentran bien y ninguno presenta síntomas de padecer problemas respiratorios.

Hasta el momento, han muerto a causa del COVID-19 más de 2.300 personas y hay unos 76.000 contagiados en una treintena de países, aunque la inmensa mayoría de los casos y los fallecimientos se registra en China.