WASHINGTON, (AFP) – Legisladores demócratas y organizaciones defensoras de los derechos humanos denunciaron ayer la destrucción de cintas de video de interrogatorios a miembros de Al Qaida por parte de la CIA, y reclaman una profunda investigación por obstrucción a la justicia.
El director de la CIA, Michael Hayden, admitió el jueves que sus servicios habían destruido en 2005 varios videos de interrogatorios sensibles, entre otras cosas para proteger a los agentes que participaron en ellos de eventuales represalias de Al Qaida.
Bush «no recuerda haber sido informado de la existencia de estas cintas o de su destrucción antes de ayer (jueves)», cuando fue informado por Hayden, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, a la prensa.
Esa decisión constituye «una obstrucción a la justicia y un ocultamiento de pruebas», denunció Amnistía Internacional en un comunicado, en el que recuerda que según numerosos testimonios los prisioneros de la CIA fueron torturados durante los interrogatorios. «Si los casettes contenían pruebas de conductas delictivas, hubieran expuesto a los involucrados a demandas penales», insiste Amnistía, que reclama una profunda y abierta investigación. «La destrucción de esas cintas parece inscribirse en un contexto global, denunció la organización de defensa de las libertades civiles ACLU.