No conozco las causas por las que finalizaron las operaciones de la línea aérea Iberia en nuestro país, cuando aparentemente eran rentables, pues durante largo tiempo Iberia acaparó el mayor porcentaje de viajeros dominicanos a España, hasta que apareció Air Europa, con unas tarifas envidiables. Los famosos “tijeretazos”, hicieron doblar el pulso a Iberia, que finalmente, al tener una fuerte competencia, tuvo que meterse en el juego de las ofertas llamativas.

Llegué a comprar pasajes de ida y vuelta Santo Domingo-España, hasta por 300 dólares, en ofertas no sólo de Air Europa, sino también de Iberia. En medio de esas fabulosas ofertas se anunció la poca entendible y salida de operaciones de Iberia, dejando todo el mercado dominicano en manos de Air Europa, compañía aérea que astutamente ha usado todo su monopolio en la ruta Santo Domingo, Madrid y viceversa.

Entendiendo que al ser un solo proveedor de esta ruta aérea directa, no tiene competencia, no le preocupa ofertar diferentes precios porque entiende que el consumidor dominicano está obligado a adquirir sus servicios mediocres al precio que ellos impongan.

Entendemos que los costos de operaciones aéreas han subido, pero, no es para cargar pasajes aéreos hasta con un 60 % de su costo anterior, salvo algunas circunstancias graves.

Normalmente, en clase económica los pasajes Santo Domingo-Madrid, cuestan alrededor de unos 60,000 pesos, pero esto sube, dependiendo de lo que decida la compañía aérea. Por ejemplo, en diciembre pasado los boletos llegaron a costar en la ruta ida y vuelta Madrid Santo Domingo hasta 1,700 euros. La mayoría de los pasajeros pagó alrededor de 1,400 euros, casi 90 mil pesos dominicanos.

Estamos hablando de una clase económica que viaja de manera muy incómoda por la estrechez de los espacios entre los asientos. No entiendo como un gobierno de un país eminentemente turístico permite este monopolio aéreo, no protege a los dominicanos que están obligados por diversas causas viajar a Madrid.