POR SEGUNDO ANTONIO VÁSQUEZ
En la calle Fabio Fiallo número 61 hay un edificio moderno de dos niveles, construido en 1998 por el ingeniero Carlos L. Contreras, que tiene un aspecto muy curioso, debido a que al lado izquierdo de su fachada se aprecia un par de altos tragaluces paralelos y amplios, que los divide hasta la mitad placas de mármol gris, los cuales tienen bloques de vidrios cuadrados unidos y bordeados con molduras que invertidamente rematan curvadas.

El segundo nivel tiene una ventana de forma rectangular con bordes curvados envidriados, cuyo cimiento es un corto sobresaliente de concreto, el cual encierra un hueco de terreno con matas de flores, cuya pared frontal tiene un letrero que dice Edificio Profesional San Antonio.

El techo tiene una moldura sobresaliente en forma de marquesina en cuya cima aparece un centro con doble inclinación bordeada por una cubierta de tejas.

El primer nivel tiene una entrada alta con escalones de cuatro peldaños, en cuyo medio aparece una galería interna rara, debido a que a la derecha tiene una solitaria columna redonda estriada montada en base cuadrada de mármol negro que aparentemente soporta el plafón del segundo nivel.

Sin embargo, es singular al tener a la izquierda molduras que bordean dos puertas, la primera normal, unida a otra cuya parte superior es arqueada, situada en el medio frontal, la cual también está enlazada a una ventana cuyos bordes son ovalados con vidrios que interiormente sirven de tragaluz, y ambas se proyectan hacia adelante formando el vértice de un triángulo.

Así mismo, al lado continúa otra ventana rectangular que se introduce en la pared derecha, donde se aprecia abajo un espacio de terreno cercado en forma triangular en cuya concavidad hay matas de flores y palmas. Su piso es de granito color crema claro y los inicios de la pared hasta la mitad tienen incrustados placas de mármol gris.

El plafón está construido con planchas de madera barnizada, el cual tiene varios huecos redondos en donde hay bombillas reflectoras fluorescentes, pero lo curioso es que éste a la derecha no se une a la pared, debido a que allí se observa una concavidad rectangular donde interiormente hay elevadas paredes de madera rectas que terninando inclinadas dejan otro espacio hueco que sirve de respiradero de pared.

Ya en la parte derecha frontal está la entrada al patio con un callejón, donde la puerta que lo cierra está construida con una plancha de hierro, que encima la cubre el decorado de incrustaciones de varias barras formando adornos curvos.

EDIFICIO SAVIÑÓN

También tenemos el Edificio Saviñón, ubicado en la calle El Conde, esquina José Reyes, obra de los hermanos Nolina, Gloria y Luis Iglesias. Inaugurado hacia 1947, única edificación cuya entrada principal está en el vértice cortado del ángulo, donde aparece una singular marquesina curva con bordes dentados cuyo plafón debajo tiene en el medio una triple moldura redonda con una bombilla reflectora.

Los lados frontales tienen columnas cuadradas unidas a la pared en cuyos bordes centrales hay una ancha moldura con cuatro altos huecos curvos y arriba el nombre del edificio.

Las paredes de los laterales tienen una cantidad de estrechas columnas verticales de mármol rosado, las cuales paralelamente encierran una hilera de cristales gruesos colocados en forma inclinada. Asimismo, las tiene como paredes sin cristales una torre redonda que hay en el techo, de cima cóncava, cuyo tope tiene un alminar circular con paredes estriadas.

Las paredes laterales de abajo, a partir de los inicios hasta el medio, aparecen cubiertas de mármol gris jaspeado y salpicado de negro. También están los grandes marcos de sus puertas de cristal grueso y zócalos del fondo igual de mármol.