MADRID, España.- Más de un centenar de artistas españoles firmaron una carta en la que manifiestan su indignación por “el genocidio que está perpetrando el ejercito de ocupación israelí en la Franja de Gaza contra la población palestina”.

Señalan que “Israel es el país que más incumple las resoluciones de las Naciones Unidas y que menos respeta los derechos humano. Es un país ocupante que ejerce prácticas de terrorismo de Estado¨.

Entre los artistas que firmaron la carta se encuentran los ganadores del Oscar Javier Barden y Penélope Cruz, quienes acorralados por las críticas provenientes de Hollywood, se han retractado en gran parte del contenido de la citada carta.

Ante el temor de que se le cierren las puertas de la Meca del Cine, Penélope Cruz publicó un comunicado en el USA Today afirmando que ella no es una experta en el tema, que está consciente de la complejidad del problema y que lo que desea es la paz entre israelíes y palestinos.

La pareja de artistas no calculó que Hollywod es un terreno totalmente judío. Principalmente, los altos ejecutivos, productores, directores, el 90 por ciento de los artistas y técnicos, quienes siempre han mostrado afinidad y apoyo a Israel.

Los artistas no se atreven a comentar nada de Israel, ni de los judíos. Aquellos guapos que lo hacen, como Mel Gibson, en su película, La Pasión de Cristo, que muestra a los Sumos Sacerdotes Judíos, entre ellos Caifá, como responsables de la pasión y muerte de Jesucristo, al entregarlo a Poncio Pilato, Hollywood, les borra de su mapa.

El famoso diseñador John Galliano fue despedido de la Casa Dior, luego de que la actriz israelí Natalie Portman, ganadora del Oscar por Cisne negro, se quejara de unos comentarios ofensivos que hiciera Galliano en torno a los judíos.

Incluso, judíos norteamericanos han sido víctima del gran poder sionista, como el caso del comentarista John Stewart de Canal Comedy, que ha tenido que auto censurarse.

Hay que dejar claro, que no todos los judíos del mundo aprueban las acciones del ejercito israelí, que mata a mujeres y niños inocentes palestinos, por orden del genocida Benjamín Netanyahu.

No todos los judíos, ni todos los musulmanes, son terroristas, pues hay de todo en la viña del Señor.