Detalles de la vida

Detalles de la vida

Cuántos detalles tiene la vida que dejamos pasar por alto, cosas y situaciones que nos pasan desapercibidas, que no apreciamos su significado. Hoy me doy cuenta de cuántas cosas a las que nos aferramos no tienen un verdadero sentido.

Ante mi situación, se presentaban dos caminos:  Uno, era preocuparme, amargarme y cuestionar  todo lo que me ha sucedido.  Todas estas cosas que me han cambiado la vida.

El otro camino, es aceptar esas cosas que no puedo cambiar, ser feliz a pesar de todo lo que estoy atravesando, valorizar este regalo y seguir disfrutando de las maravillas de la vida.

Las enseñanzas de un amigo me han hecho escoger este camino, sus ideas antiguas pero innovadoras han sido fuente de inspiración para muchos, gracias Jesús por ser mi amigo, porque en ti confío.

Nuestras vidas están llenas de cosas bellas, sólo tenemos que descubrirlas.

Esos detalles que vemos en fotografías o películas que a veces creemos inalcanzables, los he descubierto como un regalo de Dios, qué maravilla ha sido para mí ver la naturaleza, los cambios de estaciones, despertar y volver a nacer, terminando el verano, apreciar la brisa fresca de otoño, y ver la hojas secarse y caer, los grandes árboles dejando ver sólo sus ramas, los pajaritos y ardillas caminando sin obstáculos, cómo cambian los colores y se torna amarillento, luego ocre, para llegar al frío del invierno.

Pero qué belleza indescriptible es ver la primavera llegar, ver florecer los caminos, la vida refleja la alegría de los colores. ¿Por qué he de quejarme de todos estos cambios? Es la naturaleza y todo es vida, y pensar que las hojas se secan para renacer con fuerza en la primavera, vemos cómo se sufre para renacer con fuerza, esos cambios también son necesarios para nosotros, y debemos aceptarlos y tratar de salir fortalecidos.

¿Por qué no buscar soluciones a cada caso o sino, por qué no los acepto y decido ser feliz a pesar de todo. Eso que dejamos pasar sin disfrutarlo no volverá, no perdamos las oportunidades que Dios nos brinda cada día?

Cuántas veces me decían que debía recoger las notas de mis hijas, y pensaba cuánto inventan, ¿por qué no las mandan y ya? Hoy pienso cuánto disfruté ver esas caritas con una mezcla de duda y admiración, esperando lo que dijera el profesor, y qué orgulloso me sentí cuando me decían, qué buen trabajo está haciendo con esas criaturas. Hoy no he tenido ese placer, pero he disfrutado sus logros como si fueran míos. Pensaba cuanto inventan los colegios con la graduación, cuantas reuniones, afanes, gastos. Y pienso cuánto me hubiera gustado ser parte de ese afán, quería estar allá pero Dios me ha enseñado a ejercitar la paciencia, y a aceptar lo que no puedo controlar. Gracias a la generosidad de manos amigas, me permitieron disfrutar en primera fila cibernéticamente de la graduación de Paola.  

Son momentos en que no pienso cuánto he trabajado, cuánto he ganado, sino cuánto tiempo pude dedicarle a mis hijas y no se los di, cuántos abrazos de buenas noches me perdí por llegar tarde, haciendo nada muchas veces.

Cuántas veces supe de un amigo enfermo y me pidieron alguna oración, quizás la hice en el momento, y quizás pronto lo olvidaba, porque no sabía realmente su importancia.

Cuándo se me hubiera ocurrido escribirle una carta o email de aliento a un amigo o un desconocido, y hoy me animo yo con ellos, ya saben la alegría y emoción que siento cuando expreso   el  apoyo amoroso que he recibido.

¡Cuántos colores tiene el cielo, qué bello el amanecer, pero cuanta belleza puede tener el ocaso, a pesar de indicar que acaba el día! ¡Qué emoción ver a un cardenal cantando en mi balcón!, este pajarito colorido sólo lo había visto en las gorras de los Cardenales de San Luis, o un armadillo o una tortuga correr asustados por mi presencia, a pesar de su fuerte coraza. Todo se ve diferente, si queremos verlo, he decidido ver el vaso de agua que está en la mitad, como medio lleno, ¿por qué verlo medio vacío?

Los que leemos estas palabras es porque estamos vivos, disfrutemos la vida segundo a segundo, en todo hay una belleza, aunque esté escondida.

Tus oraciones y mails me llegan a lo más hondo de mi alma, no dejes de hacerlo.

En síntesis

Ing. Miguelito Arbaje

En agosto de 2008 salió hacia Houston a someterse a una sencilla intervención cardiaca, durante el procedimiento su corazón presentó problemas y muchos de sus órganos dejaron de funcionar. En situación crítica, le practicaron varias cirugías, una de ellas para colocarle un dispositivo de asistencia ventricular.

“Después de un año de mi cirugía, mi recuperación ha sido increíble, sólo explicable como un verdadero milagro, ya que me habían dado una recuperación de 1 a 10,000, con un tiempo de espera de más de seis meses para comenzar a recuperar mis afectados órganos.

He ahí el gran milagro, mi cuerpo se ha recuperado en un 90%, habiéndose normalizado los riñones en solo mes y medio, al igual que los otros órganos. El que todavía no se ha recuperado del todo es el corazón, que sigue siendo asistido por un dispositivo de asistencia ventricular, lo que me ha permitido seguir viviendo y en recuperación”.

Desde un principio se planteó la necesidad de un trasplante de corazón, pero su condición física no resistía una operación de esa categoría. Hoy es posible, gracias a que en menos de seis meses logró una recuperación que se estimaba tomaría quizás algunos años.

Mientras espera un corazón que le devuelva a la normalidad, Miguelito aprende a ver cosas que no había visto o a valorarlas mejor.  

Publicaciones Relacionadas

Más leídas