MADRID, España.-El papa Francisco está preocupado por la situación actual entre Estados Unidos y Korea del Norte, de la que dice que se “ha calentado demasiado”.
El sumo pontífice piensa que es urgente buscar una mediación; mientras tanto, los dos países exhiben peligrosamente el poderío bélico de cada uno, lo que podría tener consecuencias lamentables en toda la región asiática, principalmente en Japón y Korea del Sur.
Esta no es la única situación que está que arde, hay muchos conflictos por doquier, aunque la mayoría no acontecen en América Latina, con excepción de Venezuela, es innegable que gran parte del planeta Tierra está afectada por guerras, como el mundo árabe, donde en algunos lugares como Irak e Siria, la destrucción y la muerte son temas cotidianos.
El papa también está inquieto por Venezuela. Aunque en este caso no hay misiles nucleares, los últimos acontecimientos que han dejado varios muertes son otra espina que duele, sobre todo porque Francisco conoce bien todo lo relacionado a países de América del Sur, cercanos a su tierra natal, Argentina.
Entiende que también urge una mediación efectiva entre el gobierno de Nicolás Maduro y los opositores a su régimen, una situación que ha llevado a miles de venezolanos a abandonar apresurados su país, por el caos reinante, la falta de medicamentos, comida, amén del miedo a represalias de parte del Gobierno.
Europa tampoco se libra de problemas, además de confrontar acciones terroristas, la unión entre los países del Viejo Continente puede desaparecer como consecuencia de políticos de mandatos de ultra derecha, como la francesa Marine Le Pen, quien manifiesta que de ganar el próximo domingo las elecciones en Francia, su país saldrá de la UE, y emitirá una nueva moneda francesa, ya que ella considera que el euro “está muerto”.
Marine Le Pen, una política de pensamientos similares a Donald Trump, asegura que expulsará de Francia a muchos inmigrantes y, su extremo nacionalismo promete acciones que pueden poner en peligro a su país, que actualmente sufre ataques terroristas.
El mundo europeo reza porque esta mujer no llegue a ganar las elecciones, pero Le Pen tiene muchos votos a su favor. En cuanto a preferencia, está en segundo lugar de popularidad, lo que asusta e inquieta mucho. Lo que suceda el domingo en Francia tendrá una gran repercusión en toda Europa. Esperemos que a través del voto se frene a esta nacionalista ultraderechista de cuidado.