Detalles encantadores en la ropa para niñas

Detalles encantadores en la ropa para niñas

Los bordados en panales y punto de cruz se utilizan desde hace décadas en la confección de ropa para niñas. Se trata de un trabajo que se distingue por la sencillez y elegancia que les confieren a cada pieza.

Consiste en una labor ardua, ya que se realiza a mano, y preferiblemente con tejidos de lino, algodón y seda, por ser las telas adecuadas para este tipo de diseños.

La falda fruncida, el corpiño semi ajustado, mangas aglobadas, vuelos de la misma tela, encajes… son elementos que le dan el toque característico a los vestidos hechos con estos detalles.

Los pequeños estampados en flores, listas y cuadros, así como las telas lisas son las escogidas por los diseñadores para la elaboración de estas piezas que son verdaderas cómplices las infantes.

Los panales y punto de cruz se destacan tanto en trajecitos en colores claros como fuerte, como el verde, azul marino, rosa viejo, azul cielo, limoncillo y naranja. Estos tonos también son combinables en cuadros, flores y rayas.

Nancy Jiménez tiene más de 12 años trabajando estos tipos de bordados y aplicándolos a sus diseños, porque a su entender es un trabajo tradicional que permite a las niñas lucirse bien vestidas.

Cuatro colecciones con piezas únicas, casuales y de fiestas lanza al mercado cada temporada. Los precios varían de acuerdo al tipo de diseño, ocasión y edades de las niñas. Estos oscilan entre 600 y mil pesos.

Las niñas se “ven monísimas” cuando asisten a un cumpleaños, bautismo o cualquier otra fiesta de mayor relevancia, asegura la profesional.

La tradición del trabajo en punto de cruz y panales proviene de España y fue introducida en América, según Jiménez, hace varios siglos a través del trabajo de lencería.

Asegura que es un tipo de manualidades que se usa, con mayor frecuencia, en Cuba, Colombia, El Salvador, Perú y República Dominicana. Según datos, estos bordados fueron usados en ropas infantiles a mediado del siglo pasado.

“Nancy Jiménez Atelier” está ubicado en la calle Francisco Villaespesa, númrto 232, en el ensanche La Fe.

[b]Vocación[/b]

Nancy Jiménez comenzó desde niña a identificarse con los panales y punto de cruz para luego de adolescente reafirmar su vocación al ingresar a la Escuela de Costura que funcionaba en el Centro Educativo Marillac.

Específicamente aprendió a bordar en panales en Manuarte, una institución dedicada a la ensenza de manualidades ubicada en la calle Máx Henrique Ureña, de la zona Metropolitana.

Dice que su trabajo, se distingue además, porque sus piezas son únicas en el mercado, con los colores y texturas propias de cada estación.

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