¿Quién no desea vestir su casa con piezas de países exóticos? Tener un rincón de África en su salón, pasear por la India y traerse unas sedas, picotear y saber mezclar objetos de procedencia zulú con colchas étnicas o tomarse un té con sabor marroquí.

Esto no significa comprar souvenir en cada aeropuerto del mundo al que se llega, sino todo lo contrario, salir de paseo por el planeta y explorar en la calle aquellos elementos que pueden adaptarse a su hogar.

La riqueza cultural de esta práctica consiste en saber combinar con arte las piezas de aquí y de allá y eso se logra entendiendo la cultura de la que trata de impregnarle respetando su estética, colores, formas y materiales utilizados en la decoración.

Las tendencias tribalistas están cada vez más de moda y ya hay muchas tiendas que saben ofrecerle el arte, el reflejo de la decoración de todos esos países que nos embaucan por su especial magnetismo.

En la actualidad, las líneas más marcadas de la decoración con respecto a esta tendencia proviene de África. Hay todo un universo que el tribalismo puede aportar en la decoración.

Desde estatuas talladas en madera, hasta muebles de madera o pieles de animales que pueden ser utilizadas como tapetes o alfombras. También hay una afición por las máscaras tribales de diferentes culturas africanas.

Algunos pueden pensar que para lo étnico no hay reglas, ni modas. En realidad lo importante es mantener un estilo en donde se mezclen todos los materiales y texturas siempre y cuando guarde concordancia y transmitan una fusión de culturas. Si apuesta por esta decoración lo tribal debe aparecer como núcleo sin que esto signifique saturar el ambiente con muchos detalles. Recuerde que decorar no es rellenar.

En definitiva, la decoración de su hogar se puede convertir en una filosofía de vida, en un espíritu viajero porque desde el sofá de su casa podrá transportarse a otros mundos que no le dejarán indiferente.