MADRID, España. -El asesinato de una niña española de 14 años ejecutado por un joven dominicano de 18 , es uno de los acontecimientos trágicos que más ha conmovido en los últimos días a este país, que sufre como otra nación cualquiera el deterioro moral y humano de su sociedad.

Se dice que el joven dominicano mantuvo durante un año relaciones sentimentales con la jovencita, quien finalmente decidió no continuar con el noviazgo, no se sabe por cual razón, pero, amigos de ella han manifestado que esa unión sentimental era muy conflictiva, principalmente, porque él era una persona muy celosa.

Lo peor de esta historia es que los padres de la niña apoyaban la relación hasta el punto de que permitían que el novio viviera en la casa de ellos, posiblemente, desde que su hija apenas tenía unos 13 años de edad.
Particularmente, no entiendo cómo unos padres puedan apoyar y, dar cabida en su hogar, al joven amante de su hija de 14 años para que ella mantenga una relación propia de adultos con un joven, quien en este caso y, para desgracia de ellos, sufre de graves problemas mentales, que le obliga a mantenerse medicado.

La jovencita asesinada de varias puñaladas era miembro de una conocida familia de Tarrega. Su abuelo profesor y un tío concejal. Sin embargo, al parecer los padres, también con buena educación fueron muy permisivos y liberales, pues solamente un tipo de gente que dejan hacer y pasar cosas a sus hijos tan serias como convivir maritalmente en sus propias narices, siendo apenas niños, deja mucho que decir.

La propia madre del homicida, acongojada con la tragedia, llena de tristeza, como es natural ante un hecho tan violento, ha dicho que su hijo cambia de humor repentinamente, que tiene que medicarse para estar bien. Por esta razón no le pareció correcto que apenas su hijo cumplió 18 años, se fuera a convivir con la menor en la casa de los padres de ella.

La madre del joven dominicano cree que durante ese tiempo su hijo dejó de tomar el medicamento que se le había indicado.
El joven homicida dice ahora que él mató a su novia porque así se lo indicó la pandilla de nombre La Trinitaria, a la que perteneció un hermanastro, a quien recientemente le han condenado a 12 años de prisión por haber apuñalado gravemente a dos hermanos.