MADRID, España.- Venezuela se desgarra, y en estos momentos no se vislumbra una solución a los enfrentamientos entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, que está agotada de las medidas dictatoriales que le impone un régimen odioso, para millones de venezolanos que se sienten constantemente presionados, asustados a merced de un presidente medalaganario,
Los venezolanos están pasando las de Caín, una economía precaria que les ha bajado visiblemente su poder adquisitivo, que no les permite una existencia tranquila, sin sobresaltos, ni siquiera pueden comprar artículos de primera necesidad, alimentos, fármacos, hasta cosas simples, como una toalla sanitaria femenina o un pap el higiénico, hay carencias de todo.
En España, la gente está preocupada por los acontecimientos en Venezuela, y se solidariza con el envío de medicamentos y comestibles, a través de instituciones sociales, sobre todo en estos momentos que el país sudamericano se desangra. 50 muertos en las manifestaciones en contra del régimen de Nicolás Maduro.
Venezuela, en diversos periodos de su historia, ha sido gobernada por regímenes que van desde dictaduras hasta democracias muy corruptas, que la han saqueado sin misericordia, propiciando ambientes de inconformidades. Conyunturas que dan paso a “salvadores”, como fue el caso de Hugo Chávez, con un gobierno de corte populista pero, que con los años y medidas políticas, sociales y económicas incorrectas terminaron dañando al país, que ha pasado de Guatemala a Guatepeor con Nicolás Maduro-
Los ricos venezolanos, aquellos que se beneficiaron de gobiernos corruptos, ahora viven en diferentes países, justo en los más exclusivos lugares, como por ejemplo en Madrid, en La Moraleja, Puerta de Hierro, Barrio de Salamanca. En República Dominicana algunos están en Punta Cana y en Casa de Campo, en La Romana. Muchos de ellos, en el fondo, también son culpables de lo que sucede en Venezuela. Con sus ambiciones aumentaron en las ciudadanía las diferencias económicas y sociales, que terminaron hartando a los venezolanos marginados que esperanzados depositaron sus inquietudes de pobreza en gobernantes populistas, quienes normalmente hablan y prometen más de lo que finalmente hacen, pues no saben gestionar correctamente los asuntos de un Estado.
También, debo decir que hay venozolanos que no son tan ricos que se han visto precisados a salir de su país en la búsqueda de nuevos horizontes que les permita un cambio de vida o de esperanza, para regresar a su tierra natal.