El presidente de la Central Nacional de Detallistas Unidos dijo ver con preocupación la baja oferta y la especulación en los precios del pollo fresco en los diferentes negocios del país y propuso una estrategia para bajar la libra de 90 y 95 pesos a 70 pesos
Ricardo Rosario dijo que al parecer que la última producción de pollos no ha permitido un rendimiento como el que siempre han tenido, lo que se atribuyen al calor que hace en los últimos meses y a un problema con la alimentación de las aves.
Los productores han dicho que esas dos situaciones han provocado una reducción en el peso del pollo no superando en algunas ocasiones de 3 libras cuando debería de llegar entre 4.5 y casi 5 libras en los 40 días que dura una «pollada».
Es por ello que proponemos que, partiendo del precio de 42 pesos en granja, aplicando un 15% de merma, un 5% al transporte y margen de intermediación al mayorista de un 10% el pollo llegue al detallista a 55 pesos la libra, para que estos a su vez lo detallen a 70 pesos al consumidor final.
Para esto se necesita la colaboración de todos los sectores envueltos y la mano dura de las autoridades
Hace dos meses , el pollo costaba 28 pesos en granja y el Gobierno tuvo que intervenir, pignorando con alrededor de 900 millones de pesos en pollos, ahora resulta que e en las grandes empresas productoras, se está vendiendo entre 42 pesos la libra en granja y en los pequeños productores está entre 48 y 50 pesos.
Rosario dijo que eso hace que la mayoría de los vendedores de los intermediarios en las polleras lo venden a 67 pesos la libra
Sin embargo, el dirigente comercial expresó que en el caso de algunos colmaderos quienes compran directamente a otros intermediarios que tienen sus propios mataderos, les esté llegando por encima de los 70 pesos.
Rosario advirtió que de esto seguir así y ante la falta de oferta de los principales productores de pollo, quienes recientemente duraron tres días sin salir a la calle a vender, la libra de pollo pudiera venderse por primera vez en República Dominicana sobre los cien pesos al consumidor final.
El dirigente comercial consideró que la solución a esta situación no está en las importaciones, sino más bien en verificar los inventarios de los pollos pignorados y en comenzar a bajar el precio con ofertas, aunque sea utilizando los pollos congelados.
reiteramos nuestro interés en colaborar en el caso de los detallistas, pero esto tiene que ser avalado por el gobierno a través del gabinete agropecuario, la comisión avícola y los principales productores del país.