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La Procuraduría General de la República y la Policía Nacional informaron este martes que con relación a la muerte del periodista José Agustín Silvestre de los Santos fue detenido uno de los presuntos autores materiales e identificado el autor intelectual, al mismo tiempo que identificaron el vehículo que utilizaron en el rapto.
El detenido es Ángel Mañón Gutiérrez, quien junto a tres hombres en procesos de investigación raptaron en La Romana, el pasado día dos al citado comunicador, posteriormente asesinado al resistirse, cuando era trasladado a un lugar de Santo Domingo.
El cadáver de Silvestre fue hallado en el lugar denominado El Peñón, próximo a Sabana del Soco, entre La Romana y San Pedro de Macorís.
Los atacantes viajan a bordo de la jeepeta toyota highlander, alquilada en el dealer, Javi Renta Car, ubicado en la Caleta de Boca Chica. El vehículo fue alquilado por Ana Milagros Hasbún Mercado, novia de Joaquín Espinal Almeyda Daniel y/o Matías Avelino Castro, señalado como el autor intelectual del asesinato.
El proceso investigativo estableció, además, que la jeepeta fue devuelta tras el asesinato del comunicador por la señorita Raisa Dalenis Avelino, hija de Espinal Almeyda, quien se encuentra prófugo.
Las autoridades informaron que en el proceso también es investigado Uldárico Díaz Cruz, hermano de padre del pelotero de Grandes Ligas, José Rijo, quien en horas de la tarde del domingo le fue realizada una requisa en su apartamento, donde se ocuparon dos teléfonos del prófugo Espinal Almeyda.
Además, en poder de Mañón Gutiérrez, a quien se le conoce medida de coerción en San Pedro de Macorís, le ocuparon la Jeepeta Cherokee Laredo, sin placa, propiedad de su jefe Daniel.
Como motivo hipotético del crimen, las autoridades se refieren a la última publicación de la revista La Voz de la Verdad, propiedad del comunicador, en la que hace el señalamiento de personas que pudieran estar relacionadas a hechos sangrientos, de gran transcendencia, ocurridos en esa provincia.
El proceso estableció, además, que el periodista Silvestre recibía dinero de grupos ligados al narcotráfico para sus publicaciones en la revista.
