Hoy 
Sólo un milagro podría intervenir para que el tortuoso y delicado camino que durante décadas ha recorrido el sistema eléctrico nacional pueda transitarse sin tropiezos, debido a que los contratos onerosos, la falta de recursos para pagar a las empresas generadoras y el robo indiscriminado de la energía siguen siendo los atentados contra la estabilidad de un sector que representa el empuje para el sostenimiento y crecimiento de la economía y el desarrollo de la República Dominicana.
En medio de los largos y tediosos apagones que han estado presentes año por año en las zonas no privilegiadas y hasta en las que tienen privilegio, una maraña de intereses económicos y políticos ha impedido el avance del país, sumido actualmente en otra gran crisis energética provocada porque todavía las autoridades no encuentran la forma de pagar las cuantiosas deudas viejas y nuevas.
Endeudamiento
La deuda total de las empresas Edeeste, Edesur y Edenorte a los generadores supera los US$500 millones, de los cuales US$399 millones corresponden a la deuda corriente y US$150 millones a la congelada.
Con el anuncio este martes de que la CDEEE pagaría a los generadores US$287 millones, la deuda corriente quedaría en US$112 millones.
Lo que ha ocurrido tradicionalmente, aparte de la pesada deuda económica que no soporta el Estado, es que no se hacen los mantenimientos necesarios a la mayoría de las plantas generadoras y una buena cantidad está obsoleta. De 34 plantas instaladas, solo 16 operan regularmente. Las restantes 18 trabajan con combustibles muy costosos.
Las empresas generadoras facturan al mes unos US$125 millones por la energía servida a las distribuidoras, y estas a su vez la venden al sector industrial y comercial, al Gobierno y zona residencial.
A julio de 2009, la deuda corriente de Edeeste era de US$110.65 millones; de Edesur, US$88.90 millones; Edenorte, US$81.90, y de la CDEEE, US$41.14 millones. Al final de ese año, los generadores cobraron US$76 millones por concepto de intereses.
Actualmente, el sector energético registra un déficit que oscila entre US$50 y US$60 MM.
Abono a cuenta
El cálculo de las generadoras es que las distribuidoras, que dependen de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctrica Estatales (CDEEE), para cumplir con el acuerdo que firmó el Estado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrían que abonar más de US$200 millones este mes.
La CDEEE había anunciado que tenía asegurados los US$287 millones, comprometiéndose al cese de los apagones y a cumplir con el acuerdo del FMI. Esos fondos serían liberados por el Ministerio de Hacienda del aumento en la factura por el consumo de la energía y de un préstamo de US$70 millones con la banca privada dominicana.
De no producirse ese pago el directorio del FMI no conocería la Carta de Intención del acuerdo, que establece que los pagos a los generadores de electricidad deben estar al día, cuyo compromiso fue limpiar la cuenta a final de 2009 pero el Gobierno no cumplió.
Los subsidios
El gasto promedio que cada año destina el Gobierno al subsidio eléctrico por el incumplimiento de los clientes es de alrededor US$3,000 millones. Las pérdidas de electricidad superan el 45%, pero alguien tiene que pagar ese dinero, y la forma como se cubre ese hueco es con ese subsidio.
Históricamente ha sucedido que, por no pagar el 100% de la energía que se produce, se acumula la deuda y todavía las autoridades no encuentran la forma de cumplir con los generadores.
Esa situación ha generado un círculo vicioso porque al no poder el Estado pagarle a esas empresas, éstas no pueden comprar combustibles ni dar el mantenimiento que requieren sus plantas.
Inversión
El reto que tienen los sectores público y privado es hacer altas inversiones para reemplazar las plantas obsoletas y adquirir otras con más capacidad y eficiencia.
Aunque ese es un proceso que no se completaría de la noche a la mañana, las autoridades tendrían que lograr que 1.5 millones de los clientes que no están al día paguen por el servicio que reciben. En lo relativo a la deuda congelada, los generadores han firmado acuerdos de pagos con las distribuidoras que se han ido cumpliendo, pero no al ciento por ciento. El país requiere electricidad y para ello los usuarios tienen que pagar la factura como lo hacen con el teléfono y el cable, pero además que se canalicen las inversiones correspondientes para tener un parque energético fuerte, eficiente y permanente
La cifra
3,500 millones de dólares. Es la cantidad que se requiere invertir en los próximos cinco años en el sector energético. De ellos, US$2,800 millones para generación y el resto en transmisión y distribución.
Las frases
Marco de la Rosa
El Grupo AES Dominicana ha hecho inversiones en el país desde 1997 por más de US$800 millones.
Celso Marranzini
Para que el sistema eléctrico mejore hay que hacer un trabajo arduo. Invertir en distribución, transmisión, generación.
