DGII: empeño por la eficiencia

DGII: empeño por la eficiencia

En 15 años de existencia, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) ha dejado constancia de que  es un modelo de eficiencia  en  recaudación de impuestos y tasas. Su éxito deviene  de una combinación de actualización y facilitación de procedimientos para que el contribuyente  encuentre la vía expedita para  obtener información tributaria y estar al día en sus obligaciones fiscales. Hay  énfasis permanente por  la facilitación y simplificación.

La DGII es la culminación exitosa de un largo proceso de modificaciones en la estructura de la recaudación de impuestos, que data desde tiempos de la colonia. Dos leyes, fundamentalmente, se encargan de dar forma a este modelo de gerencia: La 166-97, que fusiona las antiguas direcciones generales de Rentas Internas e Impuesto sobre la Renta, y la  227-06 que le confiere a la DGII personería jurídica y autonomía funcional, presupuestaria, administrativa, técnica y patrimonio propio.

  El resultado ha sido un ente tan funcional,  que en ocho años logró un aumento de las recaudaciones de 313%. Una mezcla de excelencia técnica y manejo diáfano ha sido fundamental en este logro. En estos días, con motivo de su 15 aniversario, la DGII tiene sobrados motivos para celebrar en grande. Congratulaciones a su director, Juan Hernández, y a través suyo a todo el personal que hace posibles estos logros.

Sugerencia a tomar en cuenta

Una de las dificultades más grandes que tienen los pequeños y medianos productores agropecuarios es el acceso al crédito para financiar cultivos o crianza, y para adquirir equipos e insumos. Si el Gobierno modificara los parámetros del financiamiento, haciendo más fácil el acceso, contribuiría de manera significativa a mejorar la producción y la productividad, en beneficio del hombre del campo y también de la capacidad de exportación.

Domingo Marte, un ex secretario de Agricultura, propone al Gobierno venidero capitalizar el Banco Agrícola, financiar invernaderos, crear fondos de garantía, agilizar la entrega de títulos de propiedad y estimular la producción de renglones básicos, entre otras iniciativas. La idea es promover un relanzamiento del sector agropecuario. Son sugerencias que bien merecerían ser anotadas en la agenda de planificación del nuevo Gobierno.

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