Santo Domingo
Debería ser lo mismo decir que hoy  es Día  del Padre  o que es  Día del orgullo por ejercer con responsabilidad el papel de progenitor. Ayer, en víspera de la conmemoración, el comercio no dio muchas muestras de activación aunque ahora la atención mediática parece mayor que antes.

Viejo mi querido viejo…”. A más de una persona se le han humedecido los ojos con esta canción y precisamente hoy es el día dedicado para reconocer a los padres dominicanos, aquellos que con sus sabios consejos y dedicación  han servido de referente para sus descendientes.

Dos ejemplos de esa entrega son Don Federico Arias, de 95 años, y Mario García, de 56, quienes hoy celebran orgullosos su día, satisfechos de haber cumplido su rol.

Sentado bajo un árbol en una de las calles de Villa Juana, don Federico deja perder su mirada y luego dice convencido que la clave para que los hijos tengan un buen futuro es darles una buena base en el hogar.

“Yo trabajaba viajando al interior, haciendo trabajos de albañilería y envarillado pero siempre pendiente a mis muchachos y cuando llegaba me decían si habían hecho algo malo y yo los corregía sin tocarlos. Nunca les di una pela a mis hijos”, expresó.

Destaca que otro punto esencial fue que siempre fomentó en ellos el trabajo “porque somos pobres y yo nunca fui vago, entonces no quería vagos en mi casa. En la mañana a estudiar y en la tarde a trabajar en algo”, explica el anciano que tiene una descendencia de seis hijos y 24 nietos.

Tanto su esposa, Nuris Castillo, como sus hijos aseguran que éste señor dio todo de lo poco que como persona de escasos recursos obtenía.

Dos de sus hijas son estilistas, uno maneja vehículos pesados y los demás trabajan como herreros.

“Yo me siento feliz, soy un hombre rico por mis hijos”, expresa alegre don Federico.

Padre y madre a la vez.  Eso ha sido Mario desde que Indirah, su hija de 25 años, tenía menos de  dos años de edad.

Producto de la separación de su esposa, quedó a cargo de la niña que hoy ve en su padre el  ser más importante de su vida.

Inicialmente en la labor de madre lo ayudó su progenitora y abuela de Indirah, pero ésta falleció cuando la niña tenía ocho años  y de ahí en adelante han sido el uno para el otro.

“Yo decidí hacerme cargo por completo de mi hija, tanto así que yo soy tapicero y  hasta perdí trabajos importantes por no alejarme de la ciudad”, narró Mario al recrear el tiempo en su memoria.

Explica que tuvo que aprender a lidiar hasta con los temas más delicados de las niñas para poder entender a Indirah  y tratar de suplirle el afecto de la madre en momentos puntuales.

 Dice que ha enseñado a su hija que hay que caminar correcto y que las cosas hay que hacerlas bien.

“Hoy  me siento feliz, satisfecho. Ella se ha portado muy bien. Ella me ha oído, no se me ha salido del camino, ningún vecino me ha dado queja de ella. O sea, que yo prácticamente me siento realizado”, dijo el hombre sin poder contener las lágrimas.

En la vivienda que ocupan, hay fotos de los dos cuando Indirah era una niña. Hoy ella es estudiante universitaria y trabaja para ayudar a su padre en el plano económico.

Las claves

Origen Día de los Padres

La idea de celebrar el Día del Padre surgió  en 1909, cuando una mujer llamada Sonora Smart Dodd, de Washington, propuso la idea para  homenajear a su padre, el veterano de la   guerra civil Henry Jackson Smart. La motivó que  cuando su madre murió en el parto de su sexto hijo, éste se encargó de criar a todos sus niños cumpliendo su rol de padre y tratando de cumplir el de madre.   Como el señor Smart había nacido el 5 de junio, ella propuso  la fecha  como Día del Padre y así se celebra en casi todos los países.

Fecha en RD

Actualmente República Dominicana es el único país del mundo que celebra el Día de los Padres el último domingo de julio. Esta fecha se instituyó en 1969, para cambiar la establecida originalmente que era el primer domingo de junio (próximo al Día de las Madres) tal como lo «sugirió» el dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina.