En el Día Internacional de la Juventud, el Consejo Dominicano de Jóvenes Trabajadores llama a las/os jóvenes a organizarse para enfrentar la difícil situación por la que atraviesa este sector de la población.

Jordania Ureña, presidente de CDJT dijo que por la falta de oportunidades, el desempleo juvenil, inseguridad ciudadana, la falta de valores y de un trabajo decente se han convertido en los principales males que enfrenta la juventud dominicana en este momento.

“Una de las grandes barreras que limita la capacidad de desarrollo a la juventud desde hace largos años ha sido la inequidad social, puesto a que esta trae consigo desempleo, y da como uno de sus resultados la delincuencia”, afirmó.

Indicó que esa es una de las razones por lo que en las cárceles dominicanas el 77% de reclusos son personas jóvenes entre 18 y 39 años.

Ureña denuncia la falta de interés de las autoridades en resolver los problemas que afectan directamente a la juventud. También los aumentos desconsiderados a sueldos de funcionarios, frente al incremento de la precarización del trabajo y la informalidad.

“Tenemos un 28% de desempleo juvenil, una cuota de participación en los procesos de decisión casi nula, los constantes casos de corrupción e impunidad, son razones que sumergen a la juventud dominicana en un estado de desesperanza y les lleva a tomar la decisión de buscar otros espacios de trabajo fuera del país por entender que las oportunidades son cada vez más escasas”, dijo la presidenta del CDJT.

El Consejo de Dominicano de Jóvenes Trabajadores pidió mejorar las condiciones de vida de las/os jóvenes ordenándolo como una prioridad de quienes dirigen las riendas del país y entidades pertinentes.

Exhortaron a los diferentes organismos incluyendo el Ministerio de la Juventud a definir cuanto antes, un plan estratégico y operativo, así como crear un sistema de seguimiento y de evaluación, para un realizar diagnóstico de la situación actual, respecto a la forma como se está administrando los recursos, a los fines de corregir los gastos que no guardan relación con las funciones fijada por la ley de juventud.