La igualdad de oportunidades sigue siendo un mito cuando de género se trata. Esto es así porque, entre otras cosas, las políticas oficiales no enfatizan lo suficiente en fomentar la igualdad. Aunque ha habido ligera mejoría, en nuestro país la desventaja de la mujer frente al hombre se manifiesta en todos los ámbitos de la sociedad, sobre todo en la actividad remunerada. El ingreso promedio de la mujer sigue por debajo del que recibe el hombre aunque desempeñen la misma función, y la brecha es más pronunciada en las actividades pagadas con salarios más altos. Por otra parte, son cada vez más abundantes los casos en que la falla de la responsabilidad paterna obliga a la mujer a ser cabeza del hogar.

Por otra parte, la violencia de género ha tenido repuntes preocupantes en perjuicio de la mujer. La tasa de feminicidios en nuestro país ha ido en aumento, sin que las políticas públicas hayan influido para disminuirla. Lo mismo ocurre con las violaciones sexuales. Aunque no hay una comprobación con rigor científico sobre el particular, hay quienes creen  que la falta de políticas públicas para instaurar la igualdad de oportunidades para los géneros, estimula de alguna manera los tipos de discriminación que afectan a la mujer en materia de seguridad.  El inventario de las desventajas de la mujer en nuestra sociedad es todavía muy elevado, y revelador por demás de que hay que trabajar para atenuar estas brechas.

El Darío en estado de coma

El emblemático Hospital Traumatológico Doctor Darío Contreras es ahora un paciente en coma. Sus signos vitales se han ido degradando. Sus quirófanos ya no funcionan, no hay áreas  para cuidado intensivo ni para pacientes en coma, y le falta personal. En virtud de la gravedad de su estado, los médicos han decidido cruzarse de brazos y demandar  atención de emergencia.

Que el hospital necesita atención y que está convertido en un desastre es una realidad que no opaca otra verdad contundente: el paro de los médicos está dejando sin atención a miles de pacientes por día, y eso no tiene justificación. Creemos que el diálogo puede lograr muchas cosas, y este es un caso en que la negociación dejaría  más beneficio que el uso de la fuerza. Debe producirse una junta de médicos y autoridades sanitarias para sacar al Darío Contreras del estado comatoso y calamitoso en que se encuentra.