Diandino: construcción del Metro serviría para dinamizar la economía

Diandino: construcción del Metro serviría para dinamizar la economía

POR GERMAN MARTE
Diandino Peña, el gerente del Metro Santo Domingo, reveló ayer que le advirtió al presidente Leonel Fernández que su gobierno precisaba iniciar un gran proyecto, como la del ferrocarril metropolitano, para dinamizar la economía, pues de lo contrario fracasaría la administración.

Dijo que el presidente Fernández está obligado a atender a los pobres, resolver “problemas viscerales” como es el transporte, pero también tiene el compromiso de dinamizar la economía.

«Tenemos seis meses en el gobierno, y yo le dije presidente yo no siento que la economía se está moviendo. Ahí están los ferreteros y los ingenieros que no venden. Los ingenieros están vendiendo todos sus equipos. Usted no aguanta eso por mucho tiempo», manifestó el funcionario durante un encuentro con los medios de comunicación del Grupo Corripio.

El funcionario agregó que le advirtió al mandatario que de no iniciar esos trabajos estaría abocado al fracaso de su gestión.

Estimó Peña que esa dinamización se logra con grandes iniciativas y que son los hombres de acción los que se casan con la gloria, «y este presidente debe tener la valentía de sacar a éste país de donde está ahora mismo», pues no basta con recuperar la confianza, se requieren hechos concretos que la avalen.

Y es precisamente el Metro, el proyecto que en su opinión, reúne todas las características de rentabilidad. Afirmó que al término de la gestión el tren va a manejar RD$900,000 millones, aseguró Peña.

IMPONER LA MODERNIDAD

Peña observó que mientras las pequeñas obras como las escuelas, caminos vecinales y los puentes en las comunidades son obras necesarias que hay que hacer, pero son obras de la premodernidad, «y la premodernidad en una mano tiene que caminar, pero en la otra tiene que caminar la modernidad».

Y afirmó que es por eso es que estas improntas «realmente hay que imponerla muchas veces, porque si nos llevamos de los políticos, consumimos el presupuesto en la premodernidad y nunca podremos proyectar hacia fuera que avanzamos».

Tras salir al paso a los señalamientos que se hacen sobre el alto costo  del Metro y la situación económica del país, Peña dijo que este tipo de obra es como todas las grandes obras que se han hecho en momentos caracterizados por grandes crisis locales y hemisféricas.

Dijo que en la peor época de Estados Unidos, en la década del 1930, Franklin Delano Roosevelt hizo las obras más ambiciosas como las represas del valle de Tenesí, porque esa obra reunía las características de dinamizar la economía y sacar al país hacia delante.

Asimismo, Peña citó el caso de la gran represa de Asuán, en Egipto, en un momento de crisis, durante el gobierno el Gamal Abdel Nasser.

También en épocas de crisis, según Peña, se construyeron la represa Itaipú entre Paraguay y Brasil, y el canal de Panamá.

«Fíjense que las grandes obras están caracterizadas porque se inician en épocas de crisis», dijo Peña, y afirmó que sus grandes obras, Joaquín Balaguer las hizo en tiempos de crisis.

Dijo que las grandes obras resuelven un grave problema y llenan el cometido principal de que es sacar a los países del estancamiento y la despiertan.

El costo estimado de la obra es de US$326.67 millones, equivalente a US$32 millones por kilómetro, un monto próximo a la media latinoamericana que es de US$33 millones por kilómetro.

Pero el funcionario explicó que el metro será financiado con un préstamo extranjero a plazo de diez a doce años y un período de gracias de tres años y medio, y a tasas que oscilarán entre 4.7% y 4.9% de interés anual.

Sin embargo, no reveló en cuáles bancos u organismos se conseguirán estos recursos para hacer el metro subterráneo cuya construcción se prevé durarán al menos tres años y medio.

Las obras serán adjudicadas mediante la modalidad de licitación pública para la parte internacional en todo lo que concierne a la tecnología; en tanto que la obra civil, se hará con una licitación local, «pues lo que persigue el presidente es conseguir despertar la economía, crear una masa de empleos entre dos mil y dos mil quinientos empleos durante la construcción y después de la construcción en una cantidad menor».

Sostuvo que entre los modelos de operación que tienen, aún preliminares, sujetos a que en el futuro se puedan reajustar las tarifas, prevé que un manejador de vagón RD$35,000 ó RD$40,000, mientras que un empleado de boletería ganaría entre RD$15,000 y RD$20,000.

Indicó que con gastos, más el costo de la energía, mantenimiento del equipo, mantenimiento general y los gastos en seguridad, se estima que el costo de operación del tren sería de US$893,000 más 10% de la gerencia.

En total de costo de operación promedio del Metro será de RD$287 millones cada mes.

El funcionario dijo que si el precio del pasaje es de cinco pesos, el tren generaría un déficit de US$4 millones mensuales; pero si se aumenta la tarifa a RD$10, el Metro no necesitaría subsidio del Estado.

Indicó que la administración del Metro será compartida con empresas internacionales con experiencia en el manejo de metros y empresas locales.

Destacó que el Metro dejará un beneficio social de US$376 millones en los primeros 5 años de operación, que están cuantificados en ahorro de los usuarios del transporte público por tener tarifas más bajas, en tiempo de viaje y en desahogo de las vías superficiales, entre otros.  Esos beneficios, exceden en US$50 millones el costo de construcción de la obra.

Añadió que el Metro incidirá en la reducción de la contaminación ambiental, creación de empleos durante y después del proyecto.

Además, dijo que la construcción de la obra incidirá en una revaloración urbana, «por ejemplo la estación que va a estar en la Ovando, está rodeada de casuchas en mal estado y de una baja cuantía en términos de plusvalía, pero inmediatamente haya una estación, esas casitas que están ahí, por profanos que sean los dueños, van a aumentar de precio».

Adujo que los constructores van a querer construir próximo a las estaciones porque los inmuebles contarían con el atractivo de que estarían cerca de la estación.

El tren subterráneo también conlleva una modernización rigurosa del sistema pluvial y sanitario en todo el corredor de la Máximo Gómez, y «contrario a lo que muchos piensan es una gran oportunidad de poder desenmarañar cuantos problemas tenemos allá abajo».

Tras resaltar su confianza en el proyecto, Peña dijo que los niveles de resistencia que se produjeron durante la construcción del puente Juan Bosch, los túneles y elevados que construyó Fernández durante su primer mandato fueron más radicales que la que ahora enfrenta el Metro. Pero la gente no tuvo la oportunidad de expresarse, de opinar sobre aquellas obras que primero maldijo y que sin embargo hoy aplaude.

«Si nosotros comparamos los beneficios de este proyecto con aquellos, estos son mayores», expresó el funcionario.

Aseguró que el Metro es mucho más rentable que todos los túneles, puentes y autovías que construyó el gobierno durante el período 1996-2000, porque el beneficio lo va a recibir directamente la gente en sus bolsillos.

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