POR RADHAMÉS GONZÁLEZ
El director de la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (OPRET), Diandino Peña, se comprometió ayer a gestionar el pago de una deuda con transportistas contraída por el Estado en 1998 cuando se creó la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA). Peña admitió que existe la deuda después que la dirigente de una de las organizaciones de transportistas, Eridania Terrero, dijera que fueron engañados en 1998, después que comprometieran sus unidades con la OMSA y que nunca se les pagó un centavo pese a las promesas.

Terrero dijo que no pertenece a ninguna organización política, sino que es transportista y que no se opone a que se construya el metro o tren ligero.

Terrero expresó que los transportistas no quieren que con el proyecto de la construcción del metro o tren ligero se les hagan promesas y que esta vez tampoco se les cumpla.

La dirigente de los transportistas advirtió que si esta vez el gobierno los engaña, podría correr la sangre porque no están dispuestos a que se les desplace con el nuevo sistema de transporte que se trata de instituir  través de la OPRET.

Al dar respuesta a Terrero, Peña dijo que conversará con el Presidente Leonel Fernández para exponerle la necesidad de que el gobierno actual salde esa deuda a fin de quitar posibles escollos en el desarrollo del proyecto de tren ligero.

Peña se reunió durante casi hora y media con transportistas encabezados por la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (FENATRANO) que preside el empresario del transporte Juan Hubieres, quien sirvió de moderador en el encuentro efectuado en el restaurante de comida rápida Provocón de Villa Mella.

El encuentro entre el Director de la OPRET y un sector de los transportistas fue iniciado poco después de las cuatro de la tarde con una exposición de Peña, en la que el funcionario expuso a los operadores de rutas del transporte las bondades del metro o tren ligero.

Peña enfatizó en que dicho proyecto no será posible si no se tiene la participación consensuada del sector transporte, cuyas unidades serán utilizadas para llevar a las estaciones de transferencia del metro a los usuarios del nuevo sistema de transporte de pasajeros. «No habrá proyecto sin la participación de los choferes», insistió.

Expresó que con el metro no habrá exclusiones de transportistas y que la participación de estos es vital en el nuevo proyecto.

«Este nuevo sistema de transporte no será válido sino hay intervención de los choferes y prometemos que habrá integración consensuada», prometió Peña.

Después de la pregunta de la dirigente transportista Rudannny Pinales, intervino un abogado de apellido Nina, quien pidió a Peña que explicara a los asistentes con cuáles recursos se financiaría el metro, que cuál sería la tasa de retorno y que si este proyecto no sería igual al del Aeropuerto El Higüero que varios años después de concluido, no se ha puesto en operación.

Las preguntas de Nina parecen haber irritado a Hubieres que sirvió de moderador, y quien exigió al exponente que concluyera con su preguntas. Alguien desde el público le gritó a Nina que quería aprovechar el escenario para promover sus aspiraciones como candidato a síndico del municipio de Santo Domingo Norte.

Nina dijo que como residente durante muchos años en el municipio de Santo Domingo Norte, deseaba que se le explicara los munícipes de esa demarcación, todo lo referente al metro o tren ligero, porque la casa donde vive sería afectada por dicho proyecto.

Peña dijo que se ha creado una oficina que tiene contactos diarios con personas o familias cuyas viviendas serían tocadas en algún punto por donde pasará el metro.

Indicó que desde ya se están pagando las indemnizaciones conforme al grado de afección que se pueda ocasionar a residentes en las áreas por donde pasará el tren.

Reiteró que el progreso tiene un precio y que cada sector del municipio de Santo Domingo Norte, debía hacer su aporte con la seguridad de que tendrán un beneficio con creces.