El presidente de Hogares Crea, Leopoldo Díaz, advirtió ayer que al menos cinco centros de tratamiento para adictos a las drogas tendrían que cerrar en varias comunidades porque tienen que desocupar los locales y la entidad no tiene recursos para alquilar otros.
Informó que entre 150 y 200 jóvenes que llevan sus tratamientos en esos centros corren el riesgo de interrumpirlos e irse a las calles, debido a que algunos de los propietarios de los inmuebles reclaman las viviendas amparados en sentencias de los tribunales.
La Ley 50-88 sobre drogas narcóticas establece que las propiedades de narcotraficantes o sospechosos de esa actividad son incautadas por las autoridades y pueden ser cedidas a entidades que luchan en la prevención de drogas hasta que un tribunal emita una sentencia definitiva de condena o de descargo del imputado.
Díaz dijo que algunas de las casas que deberán entregar están en Villa Mella, Herrera y San Pedro de Macorís. La institución fue fundada en 1978 trabaja entre precariedades.
La clave
Presupuesto
El presidente de Hogares Crea habló con la prensa luego de depositar una carta en el Senado con la que reclama al Congreso que reconsidere la asignación de 34 millones de pesos a la institución que dirige y se aporten otros seis millones para cumplir compromisos.