Díaz regresa duro; agradece confianza de Minaya

Díaz regresa duro; agradece confianza de Minaya

POR DIONISIO SOLDEVILA
NUEVA YORK.–
El entiende que todavía su momento de ser regular no ha llegado, pero el dominicano Víctor Díaz sabe que ya pertenece a las Grandes Ligas. Díaz está de vuelta en las mayores después de un breve envío a las menores y se mantiene sumamente confiado de que esta vez no regresará a los circuitos minoritarios de inmediato.

“Tengo que agradecerle al gerente general Omar Minaya, que es un hombre muy serio. El me dijo que solo iba a estar en las menores 10 días porque necesitaban un puesto y desde que se abrió otro hueco en el roster me subieron”, reveló Díaz.

El fornido pelotero ha hecho un buen trabajo como cuarto jardinero de los Metros, ocupando los puestos de Cliff Floyd y Mike Cameron cuando uno de estos se lastima, o durante alguna ausencia del estelar Carlos Beltrán.

Los resultados han sido sumamente positivos y de ahí la confianza expresada tanto por la gerencia como por el dirigente Willie Randolph.

En apenas 32 partidos en los que ha visto acción esta temporada, Díaz tiene un promedio de bateo de .280 con cinco cuadrangulares y 17 carreras remolcadas.

Mucha gente se pregunta qué resultados conseguiría como regular, pero ese es un pensamiento que todavía no atormenta al joven de apenas 23 años de edad.

“No sé si el año que viene vaya a ser regular con los Metros, ellos todavía no me han hecho esa promesa, pero estamos trabajando para hacer el trabajo que se nos pide”, manifestó.

Aun cuando la promesa no se ha hecho, lo más probable es que los Metros le entreguen el puesto ya que Cliff Floyd o Mike Cameron no estarían regresando a Nueva York por sus altos salarios.

Explicó que su contribución principal, en estos momentos, es como sustituto o saliendo desde la banca, por lo que trabaja arduamente para estar siempre disponible y listo para cualquier turno al bate.

En los dos partidos que ha jugado desde que fue regresado de las menores, Díaz tiene un jonrón y par de empujadas con un promedio de bateo decente de .286.

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