SAN CRISTÓBAL. La Secretaría de Obras Públicas  ha entregado dinero suficiente al Grupo Modesto, que lleva cinco años trabajando en la ampliación de  la carretera San Cristóbal–Baní, y la obra aún no termina, declaró ayer en esta ciudad el titular de la cartera.

El  ingeniero Víctor Díaz Rúa explicó que los trabajos de esta vía fueron divididos en dos tramos, uno desde  el kilómetro 0 hasta el 16 que, asignados a la citada compañía, mientras que otra firma fue encargada de la otra parte, desde el 16 hasta el 28.

El funcionario admitió que la obra está paralizada, pero dijo que esto no es por falta de recursos, sino por un problema financiero que sería resuelto en el día de ayer, en un reunión que sostendría con el secretario de Estado de Hacienda, Vicente Bengoa.

Aseguró que luego de que se resuelvan algunos detalles, la obra podría estar lista en menos de un año, “en beneficio de la región Sur Central, que lleva más de 20 años esperando esta obra importante para el desarrollo de esta zona del país,  históricamente marginada gobierno tras gobierno”.

En su discurso del 16 de agosto de este año, cuando asumió su segundo gobierno consecutivo y el tercero a sus 54 años, el presidente Leonel Fernández prometió terminar los trabajos de construcción de la carretera San Cristóbal–Baní dentro, del conjunto de obras que anunció al país.

En más de dos ocasiones los contratistas se han comprometido con el gobierno a terminar esta obra, que se ha convertido en “la ruta de la muerte”, debido a lentitud de los trabajos, los innumerables obstáculos y la estrechez de la misma.

La carretera San Cristóbal–Baní fue iniciada en el período de transición del 2004 por disposición del entonces presidente Hipólito Mejía, quien la había prometido en la campaña electoral del año 2000.

También, el presidente Leonel Fernández prometió en varias ocasiones en el cuatrenio 2004-2008 que el gobierno dispondría de los recursos necesarios para que esta obra de vital importancia para el desarrollo de la región Sur sea terminada cuanto antes.

La situación de parálisis de los trabajos de ampliación de esta  vía ha provocado protestas de parte de diversos grupos debido, principalmente, a los accidentes vehiculares que se han registrado.

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Sobre el puente
Con relación al puente de Madre Vieja Sur, inaugurado en marzo de este año, el ingeniero Díaz Rúa aclaró que éste no es muy estrecho como lo ve la población, sino que por contrario tiene  dos vías que, a su juicio, son necesarias debido a que se trata de  una vía secundaria.

“No podemos hacer un puente de cuatro  vías que reciba los vehículos de dos carriles. Eso es ilógico. Si lo hacemos así, entonces se arma un cuello de botella, se producirían tapones y nos iban a cuestionar que por qué  lo hicimos de cuatro  vías”.

Por otro lado, algunas personas han expresado temor por algunas fisuras que presenta el puente.