La propuesta de la cúpula de las centrales sindicales, para que sean eliminadas las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS), se aparta de los reales intereses de la mayoría de los trabajadores y de la población en general, dijo el exgerente general del Consejo de Seguridad Social Arismendi Díaz Santana.
Esa población, dijo, se siente agobiada por los copagos multimillonarios y prefieren ejercer su derecho a la libre elección.
De su lado, el investigador Matías Bosch felicitó a los dirigentes de las centrales sindicales por asumir el papel de denuncia contra intermediarias que han convertido la salud en un mercado y el sistema de pensiones en una quimera.
Sin embargo, para el doctor Fulgencio Severino, más que eliminar las aseguradoras, por el momento, lo que el sistema debe hacer es implementar la lista negativa de procedimientos y medicamentos, de forma que el afiliado sepa qué no le cubre.
“En esencia, lo que los amigos sindicalistas quieren, y añoran, es volver al Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), porque lo que solicitan es eliminar las ARS para entregarle esa responsabilidad al Gobierno, se olvidan que el Seguro Nacional de Salud es una ARS y que también son varias las aseguradoras autoadministradas”, dijo Díaz Santana.
Asegura que se pretende ignorar que el estado de cosas perjudicial para la población solo ha sido posible con la colaboración, la complicidad y el silencio de las autoridades llamadas a regular y fiscalizar el funcionamiento de la Seguridad Social.
¿Por qué esas centrales sindicales no han vetado en el CNSS ninguna de las resoluciones ni de los reglamentos aprobados que atentan contra los intereses de los propios trabajadores? ¿Cuántas iniciativas han planteado para revertir esta situación y evitar que las ARS y las PSS impongan sus intereses?, se preguntó.
Su propuesta conduce a un nuevo monopolio estatal, que en la práctica significaría otorgar el premio mayor a los responsables de los servicios médicos deficientes y discontinuos, y de la creciente corrupción e impunidad, insistió.

La cúpula de las centrales sindicales todavía no ha asimilado los lamentables resultados y el doloroso final del Seguro Social, a pesar de verse obligados durante décadas a demandar en los pactos colectivos la contratación de igualas médicas privadas con una doble cotización, debido al rechazo de los servicios y a la exigencia de los propios trabajadores.
“¿Cómo es posible criticar las ganancias de las ARS y silenciar el cobro ilegal y compulsivo de las PSS de más de RD$60,000 millones anuales a los afiliados al régimen Contributivo, incluyendo a millones de trabajadores que ganan menos de 15,000 pesos mensuales?” se volvió a preguntar.
De su lado, Matías Bosch asegura que el Estado debe asumir su rol de garante de derechos reales de los dominicanos. Invitó a los dominicanos a verse en el espejo de los países que fueron puestos como modelo de un sistema hoy cuestionado, caso de Chile.