POR LEONORA RAMÍREZ S.
Aunque Chile es considerado como un modelo económico digno de imitar, en esa nación suramericana hay un segmento de la población que está sumido en la  pobreza extrema, porque la distribución del ingreso todavía es inequitativa, afirmó María Elena Rozas, directora de la Alianza por una Mejor Calidad de Vida.

Al destacar que en su país hay dos naciones distintas, dijo que mientras impera la pobreza sólo el 10% de la población se beneficia de los recursos generados  por las agroexportaciones.

Rozas, quien es una de las disertantes del seminario internacional   “Agroquímicos, transgénicos y sus alternativas en América Latina y el Caribe”, que se realiza en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), planteó que a la par del incremento de la pobreza la clase media chilena también ha disminuido su calidad de vida.

“Ese es el Chile actual, si quieres ver nuestro país con otro prisma te encuentras con el éxito, el glamour, el crecimiento económico… definitivamente es un Chile engañoso”.

En adición a las dificultades económicas aparecen  los problemas sociales que provocan el consumo de drogas que, según Rozas, aumenta cada día más afectando a los segmentos más jóvenes.

“Hay jóvenes que no trabajan, no estudian, roban para consumir estupefacientes y todo el mundo sabe dónde están los puntos de venta. Todo eso es producto de ese modelo económico neoliberal que está generando mucha riqueza por un lado y, por otro, mucha pobreza.

“Además está la influencia de la televisión que aporta todo este mundo glamoroso, de altos estándares de vida que no pueden tener los más pobres, lo cual genera una frustración enorme”. Rozas manifestó que la presidenta Michelle Bachelet tiene buenas intenciones, pero está atada porque debe mantener el mismo esquema neoliberal, “en Chile no hay ninguna posibilidad de elegir a una persona que no continúe con ese modelo”.

AUN SIN PINOCHET SIGUE ESTRUCTURA DE DERECHA
El domingo 10 de diciembre de 2006 falleció el dictador chileno Augusto Pinochet, a los 91 años de edad, quien gobernó durante 19 años conculcando los derechos de los ciudadanos. En tal sentido, Rozas consideró que su deceso no eliminó los odios que provocaron sus desmanes, por los cuales enfrentaba varios procesos judiciales.

“Lamentablemente con el funeral se pudo constatar que todos esos odios antiguos han quedado intactos, uno se pudo retrotraer 30 años y ver lo mismo, el mismo discurso, los odios todavía están muy vivos. Con la muerte de Pinochet solamente se libró de llevarlo a la justicia,  pero no hay una reconciliación.

“En lo político no  hay grandes avances para llegar a acuerdos,  porque está todo igual que en la década de 1970, ya que la derecha tiene la misma actitud de rechazo a los partidos de izquierda”, manifestó.

Sobre ese aspecto dijo que el partido fuerte de Chile es la Unión Demócrata Independiente (UDI), que siempre apoyó a Pinochet y representa a los principales grupos económicos.

“El gobierno de Bachelet, igual que los anteriores, tienen muchas amarras. Lo que se dice es que la Concertación por  la Democracia es una buena administradora de las políticas que se implementaron en el período de Pinochet, y es muy conveniente para las derechas que  las izquierdas estén gobernando en esas condiciones”.

CUESTIONAMIENTOS A LA SEGURIDAD SOCIAL
El modelo de seguridad social implementado en Chile, tomado en cuenta para la elaboración de la Ley de Seguridad Social de República Dominicana, ha mejorado en materia de servicios de salud con el ascenso al poder de Bachelet, a juicio de Rozas, sin embargo, no ocurre lo mismo con el sistema de pensiones que manejan entidades privadas.

“Es común que personas que han sido jubiladas constatan que los que administran sus pensiones no manejaron esos recursos adecuadamente y reciben menos de lo que pensaban. Son verdaderos dramas porque no son  pensiones seguras, no es un modelo que esté arrojando excelentes resultado”, explicó.