POR TANIA HIDALGO
El economista Luis Álvarez Renta dijo ayer que su implicación en el expediente del Banco Intercontinental (BANINTER) le ha significado una catástrofe profesional y financiera, ya que ha tenido que pagar US$9.3 millones en abogados y sus cuentas bancarias en Estados Unidos han sido cerradas. Álvarez Renta dijo que debería declararse en quiebra.

Un jurado de una corte de Miami que lo condenó al pago de una indemnización de US$176.9 millones, al ser encontrado culpable de transferir a bancos de esa ciudad US$58.9 millones desde el Baninter, y Álvarez Renta afirmó que no tiene esa suma de dinero.

“Lo más triste de todo esto es el efecto sobre mi familia. Mi niña, de 9 años, la semana pasada vino a decirme que entre los muchachitos de la escuela en el colegio Carol Morgan había algunos que le habían hablado mal de mí,” manifestó.

Dijo que en 30 años de servicios profesionales nunca había estado en un tribunal y aseguró que siempre tuvo buena reputación y se refirió a un artículo de la revista Mercado, en una edición de 2003, en el que fue definido como el consultor que muchas empresas quisieran tener.

Argumentó que no sólo está privado de trabajar, debido al proceso legal en su contra, sino que el país está prescindiendo de él en un momento crítico.

Estimó que lo han sacado del debate nacional “en una situación de crisis terrible para el país como la que ha tenido y la que va a seguir teniendo como van las cosas”.

Álvarez Renta expresó que los primeros efectos negativos sobre su persona se iniciaron cuando en 2003 The Wall Street Journal publicó un reportaje sobre él vinculado a la quiebra del Baninter.

Refirió que la primera cuenta cerrada fue una que tenía en el Citibank desde hacía 25 años, mientras que hace tres semanas, el Bank of America también le pidió que cerrara una cuenta que aún mantenía vigente.

“Hoy precisamente en la preparación de los documentos que yo estoy haciendo aquí reuní el total de gastos de abogados que he pagado tanto en República Dominicana como en Estados Unidos por este caso y la suma ha llegado a US$9,340,000. Tengo dos años y pico que no trabajo, porque no puedo trabajar en esta condición y me han cerrado todas las cuentas bancarias en Estados Unidos,” indicó.

Álvarez Renta habló ayer por teléfono desde Miami al programa radial matutino El Gobierno de la Mañana.