El director ejecutivo del Consejo Nacional de Competitividad (CNC) afirmó que la gran industria muestra una mayor resistencia al cambio que las pequeñas y medianas empresas dominicanas.

Andrés Van Der Horst Alvarez, entrevistado en un encuentro económico extraordinario, expresó que en término de competitividad, fuera del turismo, las zonas francas y agricultura, las empresas han sido lentas para cambiar de actitud.

Explicó que el CNC ha encontrado mayor apertura y actitud para acogerse a los programas de competitividad en las pequeñas y medianas empresas y principalmente en la agricultura y no en la gran industria.

«En la gran industria hemos encontrado mucha resistencia porque entienden, en algunos casos, que estos proyectos son de un sector político determinado», sostuvo.

Al respecto dijo que la gran industria ha mostrado una actitud de confrontación con el gobierno en esa materia.

Expresó, en otro aspecto, que el CNC tiene proyectado crear unos 25 «clusters» en todo el país y que actualmente hay cinco operando.

Recordó que un cluster es una asociación estratégica «de diferentes niveles empresariales de los sectores privado y gubernamental», agrupados en una cadena productiva y en un sector determinado.

En un cluster, resaltó, sus integrantes asociados interactúan de manera voluntaria para definir estrategias de manera conjunta para contribuir a que el producto sea competitivo y rentable.

Actualmente se trabaja en «clusters» en turismo y el sector agropecuario y hay iniciativas para crear otros en áreas como calzado, por ejemplo, dijo Van Der Horst Alvarez.

Manifestó también que entre las prioridades del CNC está el fortalecimiento de la actividad comercial del país.

Con relación a este aspecto, dijo que de cara al acuerdo de libre comercio que firmará el país con Estados Unidos, el país necesita en el ámbito de la competitividad, desarrollar programas dirigidos a fortalecer la capacidad comercial.

Citó como ejemplo de proyecto de facilitación al comercio, una iniciativa que esté dirigida a mejorar la capacidad exportadora y administrativa de las pequeñas y medianas empresas.

En otro orden, dijo que lo más interesante del CNC es que es una iniciativa surgida del sector privado desde mediados de la década de los 90. Fue establecido mediante decreto en noviembre del 2002.

Esta institución, dijo, es un organismo encaminado a ejecutar acciones tendentes a mejorar la competitividad del país y la productividad y el aprovechamiento de la apertura comercial.

Recordó que actualmente esta entidad depende de la Secretaría de Industria y Comercio y que es necesario hacerla independiente, para darle la institucionalidad requerida y que pueda avanzar con los trabajos que debe realizar.

En ese sentido, dijo que el Poder Ejecutivo enviaría próximamente al Congreso un proyecto de ley para hacer del CNC un organismo descentralizado.

Señaló que conjuntamente con ese proyecto de ley, se solicitaría al Congreso Nacional la ratificación de un préstamo que recientemente fue firmado en Washington por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Secretaría de Industria y Comercio, ascendente a US$13.5 millones.

Estos recursos, dijo Van Der Horst Alvarez, se invertirán en un programa de desarrollo de ventajas competitivas y se ejecutará un programa de desarrollo de ventajas competitivas.

El préstamo le garantizaría al Consejo poder diseñar políticas independientes de un gobierno o políticos.

Entre los aspectos que el CNC se propone actuar próximamente está la mejoría del clima de negocios del país.

En ese sentido se requiere, sostuvo, trabajar en tratar de amilanar trabas burocráticas o limitantes que existen en el país y que dificultan los negocios.