La Fundación Transparencia y Democracia planteó la necesidad de que el gobierno central incluya las partidas necesarias para producir un aumento sustancial en los salarios de los empleados públicos, en el proyecto de Ley de Presupuesto y Gastos Públicos de la Nación del año 2016.

El presidente de Transparencia y Democracia, César Manuel Matos Díaz, dijo que el salario mínimo establecido para los servidores públicos es vergonzoso y estimula a los empleados de las diversas instituciones del Estado, “al macuteo” para garantizar la subsistencia de su familia, ya que 7 u 8 mil pesos que devengan los asalariados estatales de sueldo mínimo no alcanzan ni para vivir en estado de pobreza.

El dirigente de la sociedad civil fue enfático al señalar que un aumento por debajo del 30% para los empleados públicos, los policías y militares se podría constituir en una burla, ya que en la administración pública hay empleados que devengan sueldos por encima de los 100 mil pesos y no arriesgan sus vidas cada día como sucede con los policías y los militares.

Matos Díaz calificó como inhumana la acción del Estado de pagarle 7 u 8 mil pesos a una persona que en la mayoría de los casos tienen que trabajar 10 y 12 horas al día, sin que nadie les pague horas extras, por lo que, consideró que se debe realizar un aumento general de los salarios de la administración pública, privilegiando a los empleados de salario mínimo, policías y militares.

Al concluir, el presidente de la fundación Transparencia y Democracia, César Manuel Matos Díaz, instó a las organizaciones del tercer sector a unirse en torno al clamor del aumento salarial para los servidores del Estado, ya que es imposible hablar de modernización del tren administrativo, de reforma policial y de crecimiento económico, de un país con aparato gubernamental que descansa en empleados que devengan salarios paupérrimos