Hoy 
El 30 de abril de 2003 el ex presidente Hipólito Mejía le concedió asilo político a dos hermanos ex militares disidentes que seis días antes se alojaron en la embajada dominicana en Caracas.
Días después comenzaron a retrasarse los embarques de combustibles procedentes de Venezuela, pero las autoridades dominicanos afirmaron que se trataba de problemas técnicos que no estaban vinculados con el asilo otorgado.
La situación se agravó mucho más cuando el 27 de julio el mismo Chávez afirmó que el país era un centro de conspiración, y acusó al ex mandatario venezolano Carlos Andrés Pérez de planificar un magnicidio.
El ex presidente Hipólito Mejía atribuyó la información de su homólogo al síndrome de Carlos Andrés Pérez, al tiempo de negar las presunciones.
Reacción en Venezuela
Mientras Chávez esperaba una respuesta más contundente del Gobierno dominicano, mantenía suspendido el suministro de combustibles desde su país, al que República Dominicana le compra el 80% de los carburantes que consume.
El 18 de septiembre el gobierno venezolano anunció formalmente su negativa a venderle esos productos al país, así como el retiro del embajador Francisco Belisario Landis.
No tenemos fecha de regreso, pudiera tardar meses, dependerá de cómo evolucionen las cosas, refirió Chávez. Posteriormente Landis confirmó que el suministro de petróleo dependía de que una comisión especial investigara las denuncias del mandatario venezolano, y asimismo, el ministro de Energía anunció que hasta tanto el país no diera una respuesta satisfactoria a la denuncia de Chávez, no se renovarían los contratos petroleros.
Luego de intensas gestiones diplomáticas, el enfrentamiento Chávez-Mejía culminó el 14 de noviembre durante la XIII Cumbre Iberoamericana realizada en Bolivia, cuando ambos mandatarios se saludaron afectuosamente y anunciaron la reanudación de las relaciones diplomáticas y comerciales.
Chávez vs. Pérez
Como teniente coronel del ejército Chávez estuvo al frente de un fracasado golpe militar en contra de Pérez, el cuatro de febrero de 1992, y en 1993 el ex presidente tuvo que cesar sus funciones para enfrentar cargos judiciales por malversación de fondos del Estado, cuyo proceso concluyó con una prisión domiciliaria de dos años. De ahí la enemistad entre ambos políticos venezolanos.
Colaboración
Las relaciones entre el país y Venezuela también han estado signadas por la colaboración política, como la participación de Pérez en la solución de la crisis política de 1978, por la interrupción del conteo que favorecía al de 1978, surgida por la interrupción de los votos que favorecían al candidato del Partido Revolucionario Dominicano, en detrimento del entonces presidente Joaquín Balaguer. Ante las gestiones de Pérez y del ex mandatario norteamericano Jimmy Carter, Balaguer cedió y se reanudó el escrutinio.
Reanudar
Luego de intensas gestiones diplomáticas, el enfrentamiento Chávez-Mejía culminó el 14 de noviembre durante la XIII Cumbre Iberoamericana realizada en Bolivia, cuando ambos mandatarios se saludaron afectuosamente y anunciaron la reanudación de las relaciones diplomáticas y comerciales. Como teniente coronel del ejército Chávez estuvo al frente de un fracasado golpe militar en contra de Pérez, el cuatro de febrero de 1992, y en 1993 el ex presidente tuvo que cesar sus funciones para enfrentar cargos judiciales por malversación de fondos.
