LA HABANA. AFP. El presidente del Banco Central de Cuba, Francisco Soberón, renunció ayer en momentos en que la isla sufre el fuerte impacto de la crisis internacional y aplica un drástico programa bajo su consigna de «ahorro o muerte». Soberón, de 65 años, pidió su relevo al presidente cubano Raúl Castro por voluntad «propia», tras 15 años al frente del Banco Central, para dedicarse a investigar y escribir sobre finanzas, según un comunicado leído en la televisión. El funcionario ejerció el cargo «con lealtad y honestidad al igual que la mayoría de los ministros que fueron sustituidos» en marzo, dice la nota.