Dinero ayuda a ser feliz, pero no tanto

<p>Dinero ayuda a ser feliz, pero no tanto</p>

Nueva York .- ¿Acaso el dinero puede comprar la felicidad?.
Se dice a veces que los científicos no han hallado ninguna relación entre el dinero y la felicidad, pero eso es un mito, según el sicólogo Ed Diener, de la Universidad de Illinois.

Aclara que la reacción es compleja. Pero por cierto, la gente adinerada tiene un índice de satisfacción con su vida sustancialmente mayor que la gente pobre, aun dentro de las naciones acaudaladas, dice.

«Hay evidencias abrumadoras de que el dinero compra la felicidad», dijo el economista Andrew Oswald, de la Universidad de Warwick en Gran Bretaña. Agregó que el principal debate es cuál intenso es su efecto.

Oswald publicó recientemente un estudio sobre británicos que habían ganado entre 2,000 y 250,000 dólares en una lotería. Como grupo, revelaron un aumento en la felicidad que promedió un poco más de 1 punto en una escala de 36 puntos al ser consultados dos años después de su ganancia, en comparación con los niveles de dos años antes de ganar.

Daniel Kahneman, ganador de un Premio Nóbel y economista en la Universidad de Princeton, y un grupo de colegas declararon recientemente que la noción de que ganar mucho dinero produce un bienestar generalizado es «mayormente ilusoria».

Indicaron que, en un estudio, la gente con ingresos familiares de 90.000 dólares anuales o más sólo tenían una ligera probabilidad mayor de considerarse «muy felices» en general que quienes ganaban entre 50,000 y 89,999. Las tasas fueron de 43 por ciento en comparación con 42 por ciento respectivamente. Los miembros del grupo de ingresos elevados tenían el doble de probabilidad de considerarse «muy felices» que la gente con ingresos familiares inferiores a 20.000 dólares.

Pero otros estudios, en vez de solicitar un cálculo sobre el nivel de felicidad, observan a la gente durante el día y registran sus sentimientos. Estos estudios revelan un efecto menor de los ingresos sobre la felicidad, dijeron Kahneman y colegas.

La relación entre ambos factores tiene otro matiz. Aunque la gente que gana 150,000 dólares anuales es considerablemente más feliz que la que gana 40.000, no está claro por qué, observa el sicólogo Richard Lucas de la Universidad Estatal de Michigan.

¿Acaso el dinero compra la felicidad? ¿O quizás ser más feliz es lo que permite a alguien ganar más dinero debido a una mayor creatividad o energía? ¿O hay algún otro factor que produce tanto dinero como felicidad? Hay evidencias como para fundamentar las tres interpretaciones, dice Lucas.

En todo caso, los investigadores dicen que cualquier efecto del dinero sobre la felicidad es inferior a lo que la mayoría de la gente supone.

«La gente exagera acerca de cuánta felicidad se puede comprar con unos pocos miles de dólares más», dijo Oswald. «La calidad de las relaciones tiene un efecto mucho mayor que grandes aumentos salariales. Es un consejo mucho mejor, si uno busca felicidad en la vida, tratar de hallar el marido o la esposa adecuados en vez de tratar de duplicar el salario».

Publicaciones Relacionadas

Más leídas