Ayer, el diplomado “La Educación Inclusiva: Camino para un Aprendizaje Transformador en el Centro Educativo” graduó en Santiago a 45 participantes. Está enfocado en propiciar la cultura de la inclusión social para cambiar prácticas y contribuir con una educación para todos, sin distinción de ningún tipo.
La Primera Dama, Cándida Montilla de Medina, encabezó el acto de entrega de certificados.
Una nota explica que este diplomado es el segundo que auspicia el Despacho de la Primera Dama y fue cursado en el Centro de Atención Integral para la Discapacidad (Caid), en esta ciudad.

Recuerda que el primero, “Construyendo Caminos para Aprender en una Escuela Inclusiva”, fue realizado en el Caid-Santo Domingo Oeste, con 39 profesionales del área educativa, sicológica y terapéutica.

Dice que en la impartición intervienen junto al Despacho de la Primera Dama, las Fundaciones Mapfre y la InteRed, así como el Centro Cultural Poveda, el Instituto Superior de Estudios Educativos Pedro Poveda y el Ministerio de Educación.

Educación e inclusión. Al pronunciar las palabras centrales del acto, Montilla de Medina expuso que en el país hay esfuerzos por lograr una educación que responda a los valores de la inclusión, la igualdad y el respeto a la dignidad.

Aseguró que una prueba son las estrategias desarrolladas por el Ministerio de Educación de abrir aulas en escuelas regulares para la población con discapacidad y en el fortalecimiento de los Caid en las regionales.
“El modelo educativo que propugna esta visión que desarrolla el Ministerio de Educación es aquel que no discrimina, sino que incluye. Es decir, que no establece diferencias entre los educandos en razón de sus habilidades, situación socioeconómica, cultural, religiosa o cualquier otra particularidad, expuso”.

Planteó seguir el abandono de viejas prácticas y sustituir visiones erradas y prejuiciadas por un enfoque pedagógico que aliente la igualdad y el respeto a la dignidad de las personas.

Montilla de Medina indicó que la escuela está llamada a ser un espacio de igualdad y equidad.

Afirmó que por esa razón, el Despacho y el Caid fomentan una nueva visión de la educación y alientan las iniciativas tendentes a lograr ese objetivo.

“Confío plenamente en que todas ustedes pondrán sus conocimientos al servicio de esta causa de justicia a favor de la cual ya se realizan tantos hermosos esfuerzos, es decir, el trato igualitario de todos los seres humanos”, expuso, lo que según la nota generó fuertes aplausos.
La primera dama aseguró que la investidura constituyó un acto de compromiso, que reafirmó la voluntad de instituciones, tanto gubernamentales como de la sociedad civil, de trabajar unidos por la igualdad, la equidad y la justicia social.