NEW YORK. El diputado de Ultramar por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Rubén Luna Martínez, distribuyó ayer en esa ciudad más de un centenar de pavos entre dominicanos y personas de otras nacionalidades para la celebración del Día de Acción de Gracias.

Se trata de una festividad tradicional que en los Estados Unidos se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre de cada año, y en la que se consumen más de 45  millones de estas aves.

 El legislador hizo las entregas en las proximidades de los locales del partido en las calles Broadway y San Nicholas, en Alto Manhathan, Nueva York, en el condado de Queens, así como en la ciudad de New Jersey.

 Entre las personas que recibieron su pavo de manos de Luna, habían envejevientes, personas pobres y representantes de instituciones como iglesias, fundaciones y otras entidades benéficas.

Asimismo Rubén Luna  informó que hace esta labor cada año en beneficio de  los dominicanos  que residen en esas ciudades, se han sumado también los criollos que desde hace mucho tiempo viven en los Estados Unidos.

El congresista de ultramar dijo sentirse muy feliz al poder contribuir para que familias dominicanas puedan también comer pavo asado en ese día.

Luna expresó que hace esa donación porque entiende que debe darle una mano a aquellos que no tienen con que comprar un pavo para celebrar una fiesta de todos los que tienen la suerte de residir en esa nación norteamericana.  

«Mis amigos, disfruten su día de Acción de Gracias, que les aproveche muy bien este rico pavo en compañía de sus familiares y amigos más queridos», exclamó el legislador.

Sin embargo, esta tradición  tiene sus raíces en el 1620 primer año de la colonización del actual territorio de Estados Unidos, cuando los europeos recién instalados tenían la costumbre de dar gracias a Dios por la abundancia de la cosecha y la ayuda recibida por parte de los indios.   

También a esta festividad se han sumado millones de personas de otras nacionalidades que residen en los Estados Unidos.

Banquete que preparan. La mayoría de las personas en Estados Unidos celebran esta fiesta con reuniones familiares donde preparan un banquete. En muchas casas es común ofrecer una oración de gracias.

El plato principal tradicional para la cena es un gran pavo asado u horneado, se sirve acompañado con un relleno hecho de pan de maíz, y salvia, y se sirve tradicionalmente con una jalea o salsa de arándanos rojos.