SANTIAGO. El diputado Bernardo Colón, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) por esta provincia,  llamó ayer  a la dirigencia de esa organización a  mantener la calma y trabajar unidos en el proceso de evaluación y renovación, tratando de evitar que los traumas internos provoquen nuevamente una división entre las dos fuerzas mayoritarias.

A juicio del congresista y dirigente del partido blanco en esta provincia, es necesario que todos los sectores internos dirijan sus esfuerzos a la unidad de la organización, y advirtió que los líderes del PRD no pueden dejarse provocar por el gobierno y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), cuyas autoridades según afirmó, tratan de generar mayores problemas de división.

“Nuevamente vivimos en el PRD un momento crucial, especial y muy delicado que hay que saber sortear, con la cabeza fría y reflexivos. La democracia está en peligro porque el PLD y el Gobierno se han constituido en el ente único y  para esto destruyeron  el Partido Reformista, y  para concluir su proyecto de dictadura constitucional están tras el PRD”, expresó.

Colón señaló que existen dos liderazgos fuertes y buenos en el PRD que lo encarnan Hipólito Mejía y Miguel Vargas Maldonado, por lo que recomienda permitir que ambos puedan ponerse de acuerdo, “sin que se les azuce”.

“No es tiempo de confrontación, sino de entendernos y buscar la unidad para fortalecer el partido y prepararnos para los retos del futuro”, sostuvo el diputado perredeísta.

El legislador considera  que es necesario ahora adentrarse en una discusión profunda de las derrotas consecutivas que ha sufrido  el partido y ver cómo prepararse mejor para el próximo torneo electoral.

Puso de manifiesto que “es la hora de sentarse a analizar  por qué hemos perdido, por qué tenemos más votos que el PLD y no ganamos, y qué hacer para el devenir electoral”.

Indicó que el liderazgo de Hipólito Mejía y de Miguel Vargas Maldonado deben afrontar principalmente este problema, y los demás organismos ayudar a evitar divisiones y situaciones que dejen heridas difíciles de cicatrizar en el futuro.

En su opinión, es necesario que ambos líderes, así como los demás dirigentes que están en su entorno profundicen este conflicto y eviten que el PRD vuelva a sufrir una nueva división.

Sostuvo que una nueva división a nadie dentro del partido beneficiaría, por lo que hay que evitarla.