Puerto Príncipe.- Los diputados haitianos decidirán este sábado si mantienen o no el voto de confianza al primer ministro, Jack Guy Lafontant, cuyo Gobierno es señalado como responsable de la situación derivada tras la fallida subida del precio de los combustibles, que originó violentos disturbios.
La oposición convocó para hoy nuevas protestas pero de momento el país luce en calma a la espera de la sesión convocada para mañana, mientras la Policía Nacional, muy criticada por su ausencia en las calles durante los disturbios, pidió a los agentes mantenerse vigilantes ante posibles hechos violentos.
Mientras que en su cuenta de Twitter el director general de la Policía, Michael-Ange Gedeón, afirmó que esta institución “seguirá llevando a cabo su misión de acuerdo con la Constitución y la ley». El pasado 6 de julio el Gobierno anunció aumentos de entre 37 y 50 % en los precios de los combustibles en este empobrecido país, donde más de la mitad de su población vive con menos de 2 dólares al día.
La subida del costo de los combustibles, entre ellos, el queroseno, muy utilizado para alumbrar las casas haitianas de amplios sectores de escaso poder adquisitivo, desató violentos disturbios callejeros, en los que varias personas murieron.
La situación obligó un día después al Gobierno dejar sin efecto la medida, que fue producto de un acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo que esta semana planteó la eliminación gradual de la subvención a estos productos.
La presión ciudadana, además, llevó al Gobierno a retirar del Parlamento (bicameral) el presupuesto general que envió la semana pasada, como una manera de evitar nuevas protestas.
Tras la situación, sectores de la oposición y del empresariado e, incluso, del propio oficialismo vienen reclamando la renuncia del primer ministro, quien, sin embargo, no ha dado señales de querer dimitir. A través de su cuenta de Twitter, Lafontant confirmó su asistencia este sábado a la sesión de la Cámara de Diputados que debatirá si mantiene o no el voto de confianza a su Gobierno.
Lafontant señaló que irá a la sesión y hablará “de los logros de la Administración” que encabeza junto al presidente del país, Jovenel Moise, en el poder desde febrero de 2017.
La Administración de Lafontant está desde hace un tiempo en la cuerda floja y unos días antes de las violentas manifestaciones, el primer ministro había sido convocado por los diputados para analizar el destino de su Gobierno, pero él no acudió a la sesión.
El FMI dijo el jueves que espera que Haití cree un plan de reforma que incluya una reducción gradual de los subsidios a los combustibles, ya que, a su juicio, estas ayudas benefician de manera desproporcionada a los más adinerados.
Durante una conferencia de prensa en Washington, el portavoz del FMI, Gerry Rice, afirmó, que la eliminación de los subsidios permitiría al Gobierno liberar fondos para financiar proyectos a favor de los más desposeídos.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha condenado la violencia desatada durante los últimos días en Haití e hizo un llamamiento a la calma y la contención a todas las partes. En un comunicado pactado por los quince Estados miembros, el Consejo de Seguridad pidió un “cese inmediato de todas las formas de violencia” y que los responsables de crímenes sean llevados ante la Justicia.