Diputados de la región sur rechazaron ayer las afirmaciones del presidente del Consejo Nacional de Fronteras, Radhamés Batista, de que la construcción de la carretera Cibao-Sur afectará tres parques nacionales y más de una decena de ríos.

Luis José González Sánchez y Roberto Féliz, del Partido Reformista Social Cristiano, dijeron que los sureños esperan con ansiedad esa vía.

Sánchez  dijo que los beneficios serán cuantiosos porque la actividad económica entre ambas regiones aumentará con el intercambio de productos que se cultivan en grandes cantidades en provincias como Barahona y San Juan de la Maguana y lo mismo pasaría con  otras del Cibao.

El ex presidente de la Cámara de Diputados dijo que no tiene por qué afectar el medio ambiente si se toman los correctivos de lugar, pero además aseguró que la forma cómo se ha diseñado es la solución más económica para comunicar al Sur con el Norte.

Víctor Terreno, del Partido de la Liberación Dominicana, también resaltó los beneficios de la obra porque generaría empleos, fomentaría el turismo  y entiende que no se hace daño a la ecología.

Consideró que hacer la carretera desde Montecristi a Pedernales sale  más costosa y además se desaprovecharía potenciales turísticos como el trayecto Constanza- San José de Ocoa.

En tanto que el diputado del Partido Revolucionario Dominicano, David Herrera, es partidario de la vía, pero entiende que debe ser una prioridad la carretera que une a San Juan de la Maguana con Barahona.