El director del hospital Darío Contreras, Héctor Quezada, estimó ayer que ese centro asistencial necesitará en los próximos meses varios millones de pesos para poder reponerse de la demanda que ha tenido a raíz del terremoto, ocurrido el 12 de enero pasado en la vecina nación de Haití.

“Estamos evaluando para determinar con exactitud la cantidad, pero son varios millones que requiere el hospital para volver a la condición en que estaba antes de que se produjera el sismo”, precisó.

Asimismo, dijo que ya está disminuyendo el flujo de pacientes haitianos.

Precisó que los que aún están ingresados presentan múltiples traumas.

Haitianos no afectan servicios.  El especialista, de igual  modo, rechazó que  la demanda de pacientes haitianos  afecte los servicios  que comunmente ofrecen a los dominicanos y aseguró que el ministerio de Salud Pública suple todos los gastos que tiene el hospital.

El funcionario habló durante un recorrido realizado por el área infantil del centro asistencial en compañía de la directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Ann Veneman, quien resaltó el respaldo ofrecido por los dominicanos  a los haitianos.

En el recorrido participó también  la representante del organismo internacional en el país, Francoise Gruloos-Ackermans.

Las visitantes contactaron el estado de salud en que se encuentran cada uno de los niños y conversaron brevemente con sus madres o tutores.

Gruloos-Ackermans recordó que representantes del organismo internacional están en Haití ofreciendo asistencia a miles de niños que resultaron afectados tanto física como sicológicamente.