POR JUAN M. RAMIREZ
Los directores de los principales hospitales públicos del país rechazaron  que “la falta de gerencia haya llevado a la muerte al sistema de salud en el país y que los hospitales son barriles sin fondo y tierra de nadie que nunca rinden cuentas”.

La afirmación refutada por los ejecutivos hospitalarios fueron expresadas la semana pasada por el presidente del Patronato de la Plaza de la Salud, Julio Amado Castaños Guzmán.

Siete directores de los principales centros del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, enrostraron a Castaños Guzmán la gran cantidad de recursos económicos que recibe la Plaza de la Salud, por parte del gobierno lo que hace buen gerente a cualquier dominicano, mientras los directores de los centros asistenciales tienen que hacer de tripa corazón con lo poco que reciben, a pesar de que atienden a los dominicanos de menos ingresos que no pueden aportar siquiera una cuota mínima.

En rueda de prensa en el hospital Padre Billini, participaron los directores del Darío Contreras, Luis Eduardo Aybar, Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, San Lorenzo de Los Mina, Francisco Moscoso Puello y Robert Reid Cabral.

En cuanto a la falta de gerencia, el director del hospital Padre Billini,  Rafael Rojas, dijo que la mayoría de los directores actuales poseen formación académica en gerencia hospitalaria.

Afirmó que los hospitales son entidades públicas abiertas, no excluyentes con acceso gratuito a pacientes con muy baja escolaridad, presupuesto histórico acompañado por una tímida cuota de recuperación.

Con relación al término “tierra de nadie y que los centros no rinden cuentas” los directores presentaron un cuadro estadístico donde se muestran la producción de los servicios ambulatorios, partos y cirugías en varios de los hospitales de Santo Domingo, correspondiente al año 2006.

Explicó que la suma de las asignaciones  hospitalarias de siete de los principales centros  de salud del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo alcanzan una cifra de 19 millones de pesos, cantidad ésta inferior a los 22 millones que recibe la Plaza de la Salud, como subvención del Estado, sin contar los recursos que ingresan por concepto de cobros a pacientes.

En el documento, firmado por los directores de  los hospitales Doctor Darío Contreras, Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina, Ciudad Sanitaria Doctor Luís Eduardo Aybar, Padre Billini, Maternidad Nuestra Señora del la Altagracia, Francisco Moscoso Puello y Robert Reid Cabral- el grupo resalta que la mayoría de los directores  posee formación académica en gerencia hospitalaria, por lo que consideró que “la falta de gerencia” referida por Castaños Guzmán no es una debilidad de ese sistema.

 Héctor Maceo Quezada, director del Darío Contreras,  expresó que en la mayoría de los casos en que un paciente de hospital público decide ingresar a la Plaza de la Salud no lo hace porque los servicios médicos sean de mayor calidad sino porque hay más comodidades.

Asimismo aclaró que los centros públicos de salud “están, en estos momentos, más abastecidos de medicamentos que nunca”.