Por MARIEN ARISTY C.
A pesar del sol radiante y la serenidad del mar, las playas más cercanas de Santo Domingo estuvieron tranquilas el día de ayer. La asistencia de los bañistas, contrario a años anteriores, fue reducida.

Quizás por este motivo en playas como Boca Chica, Guayacanes y Juan Dolio no había reportes de accidentes, muertos o heridos. Los socorristas sólo han tenido que atender casos de alergias a bloqueadores solares, indigestiones, dolores de cabeza, pinchazos de erizos y algún que otro caso de intoxicación alcohólica.

La vigilancia, sin importar la cantidad de gente que pudiera haber, ha sido continua en las playas: allí han estado de guardia oficiales de los bomberos y la Policía Nacional. También voluntarios de la Cruz Roja, la Defensa Civil y la Asociación de Socorristas.

BOCA CHICA: CON MAS GENTE

Boca Chica fue la playa más visitada del área. Allí, aunque se podía caminar tranquilamente, hubo bastante movimiento. Pese a ello, sin embargo, los vendedores ambulantes se quejaban de que las ventas estuvieron flojas,

Clásicas, las estampas que más pudieron verse fueron las de las familias con sus ollas de espaguetis color naranja, acompañados con pan, yuca o plátanos; la de los puestos de yaniqueques y pescados fritos que, después de pasar por un aceite cuyo color ya no se descubre, se doraban aún más bajo el implacable sol y, por supuesto, la de los vendedores de collares de cuentas de maderas y caracoles.

Otra imagen que ya es tradicional y llama la atención de todo el que pasea por Boca Chica es la de la escultura del Cristo Crucificado, una obra que desde hace siete años realiza Agusto Olivieri.

Pero si de entretenimiento se trataba, amén de ver a la gente bañándose, caminando, leyendo o tomándose una «fría», el que lo deseara podía jugar voleibol, básquet y hasta dominó. Estos juegos, que pudieron verse en otras playas del país, fueron organizados por la Secretaría de Deportes.

La idea de esto, tal como explicó Fausto Corporán, es que la gente encuentre en la playa más que arena, sol y mar. «Estamos en 19 playas del país. Este es un campamento que hacemos por segundo año consecutivo (…). Tenemos técnicos de recreación y monitores de deportes en cada uno de los campamentos».

GUAYACANES: LA POLITICA ANTE TODO

Más tranquila a nivel de bañistas, Guayacanes se presentaba saturada de propaganda política: Al llegar allí, los letreros de «Lila Diputada», «Josecito Senador», «Alejandro Senador» o «Sergio Cedeño Diputado» sorprenden al visitante ya que afean a las palmeras que deben soportarlos.

Pero si los letreros contaminan visualmente, peor aún es encontrarse con una marea roja en la playa: los reformistas se empeñaron en hacer propaganda y, para lograrlo, mandaron a su gente portando camisetas con el nombre de los candidatos.

Salvo este detalle, caminar por Guayacanes resultaba todavía más agradable que hacerlo en Boca Chica puesto que la presencia de visitantes fue realmente tímida. La mayor cantidad de gente podía verse alrededor de las canchas que colocó Deportes en la playa. Allí, además, se improvisaron divertidos y sanos juegos para los niños pequeños.

Respecto a los reportes, en esta playa no ha habido heridos de importancia. Así lo estableció Máximo William, auxiliar de operaciones de la Defensa Civil, quien señaló que «todo ha estado más tranquilo que años anteriores».