Disonancias.- La observación del presidente Danilo Medina a la ley del nuevo Código Penal sigue dando de qué hablar, mas que nada porque siguen expresándose las reacciones a favor y en contra que han dividido a la sociedad dominicana en dos bandos aparentemente irreconciliables, pues aquí todo el mundo quiere opinar de todo, empezando por los oportunistas y expertos en pescar en aguas revueltas. De ahí que esas expresiones de apoyo y rechazo adquieran valor en sí mismas, dependiendo, desde luego, de quien provengan o quien las promueva, por lo que no se puede culpar a los partidarios de uno y otro bando si las utilizan como recurso propagandístico para fortalecer su causa ante la opinión pública. ¿Cómo no aprovechar el golpe de efecto que produce el respaldo ofrecido por la Secretaría de Cultos del PLD a la Conferencia del Episcopado y a las iglesias evangélicas que rechazan la legalización del aborto? Desde que leí la noticia en los periódicos, me asaltó la pregunta ¿Es esa, ciertamente, la posición del PLD, el partido de gobierno? Supongo que solo los peledeístas, o los que presumen de conocer al dedillo las interioridades del peledeísmo, pueden dar respuesta adecuada a esa pregunta, y hasta es probable que minimicen ese comunicado o lo presenten como una muestra de democracia partidaria, donde son normales y naturales esas disonancias. Pero como no soy peledeísta ni me chupo el dedo creo que la baina que le ha echado al gobierno la Comisión de Cultos es parte de la sorda pugna entre leonelistas y danilistas, exacerbada con la persecución judicial contra el senador Félix Bautista, que el Comité Político parece haberse propuesto ignorar hasta que sea demasiado tarde para buscarle remedio.