PUERTO PRÍNCIPE (Haití) (EFE).- Los disparos de presuntos partidarios del ex presidente haitiano Jean-Bertrand Aristide, estremecían ayer las calles del barrio de Bel-Air, en Puerto Príncipe, donde patrullaban soldados y policías de la MINUSTAH.
Tropas brasileñas en tanquetas vigilaban en una intersección de este sector tradicionalmente pro Aristide, junto a policías jordanos, canadienses, franceses y haitianos apostados en las esquinas.
Las pocas personas que se aventuraban a recorrer las calles de Bel-Air, llenas de escombros y restos de basura quemada a modo de barricadas, apresuraban el paso para ponerse a salvo en sus casas, según pudo comprobar EFE.
En las últimas semanas, la policía haitiana, ayudada por las tropas de la Misión de la ONU para la Estabilización de Haití (MINUSTAH) ha arrestado a decenas de personas tras incidentes que han causado más de 50 muertos y decenas de heridos.
El sonido de los disparos no detenía el caminar de algunas mujeres que trasladaban bidones de agua en sus cabezas, o el de varios niños que volvían de la escuela ataviados con sus uniformes.
En los muros de una iglesia se podían observar pequeños carteles recientes en favor de Aristide.
Aunque había tensión en Bel-Air, en un recorrido por otras calles de la ciudad, EFE pudo comprobar que los comercios y las escuelas abrieron sus puertas con normalidad.
Al menos 50 personas han sido asesinadas en Haití desde que comenzaron en septiembre los actos violentos de los seguidores de Aristide para reclamar el regreso del ex presidente al país.
Aristide abandonó la Presidencia el pasado 29 de febrero y actualmente se encuentra exiliado en Sudáfrica.
Por otra parte, el representante especial y jefe de la MINUSTAH, el chileno Juan Gabriel Valdés, de visita en Puerto Príncipe, afirmó hoy que la seguridad en el área económica es vital para la estabilización del país caribeño.
«La seguridad económica es muy importante en Haití para no poner en peligro los avances políticos que se han logrado», dijo Valdés, tras visitar la zona portuaria de Puerto Príncipe para verificar la reanudación de actividades.
«Toda amenaza a la seguridad económica constituye igualmente una amenaza contra la comunidad internacional», agregó Valdés, según un comunicado difundido por la ONU en Nueva York.
Valdés expresó satisfacción por la reanudación de las actividades económicas del puerto y de la aduana en Puerto Príncipe, gracias a la protección de las fuerzas de paz de la ONU, dirigidas por Brasil.
La apertura del puerto también permitirá desbloquear la distribución de ayuda humanitaria destinada a la población, especialmente de la ciudad norteña de Gonaives, que ha sido la más afectada por el paso de la tormenta tropical «Jeanne».