BERLIN (EFE).- La corredora bahameña Tonique Williams-Darling y el triplista sueco Christian Olsson se repartieron ayer en Berlín el millón de dólares que entrega la Liga de Oro a los atletas ganadores de las seis reuniones de este circuito.

Olsson obtuvo su sexta victoria al imponerse en la competición de salto triple con un registro de 17 metros y 45 centímetros, marca con la que superó al estadounidense Walter Davis (17,21 m.).

Williams-Darling, oro en Atenas»04 volvió a mostrarse intratable en los 400 metros, en los que endosó una nueva derrota a la mexicana Ana Gabriela Guevara, vigente campeona mundial.

Darling Williams, que batió el récord de la reunión berlinesa con 49.07, aguantó a la perfección el empuje de la mexicana, que no pudo soportar su ritmo en la recta final y se tuvo que conformar con ver ganar a su rival y marcar un tiempo de 49.53.

Al margen de las dos competiciones que decidían el reparto del millón de dólares, las otras disciplinas también ofrecieron espectáculo y duelos interesantes, pese a lo avanzado de la temporada y a la resaca de los Juegos Olímpicos.

El panameño Bayano Kamani, con un crono de 48.55, repitió en los 400 vallas su victoria en la reunión de Bruselas al aprovechar la ausencia del gran dominador de la prueba, el dominicano Félix Sánchez, que se lesionó en la carrera del estadio Rey Balduino.

En los 800 metros masculinos Yusuf Kamel, de Bahrein, logró derrotar al keniano Wilfred Bunguei, cuyo compatriota Agustine Kiprono Choge se adjudicó los 5.000 con 12:57.01, mejor tiempo mundial del año en categoría sub»20.

Los 200 metros masculinos también ofrecieron un bonito espectáculo con un duelo apretado entre el jamaicano Asafa Powell y el namibiano Frankie Frederiks que a la postre se definió a favor del primero por una centésima (20.24).

La rusa Tatiana Tomashova salió airosa de una vibrante carrera de 1.500 metros, en la que se impuso con un tiempo de 4:04.41 por delante de la británica Kelly Holmes (4:04.49), bicampeona olímpica en Atenas.

En la versión masculina, Paul Korir, con 3:32.46, lideró un podio keniano, completado por Alex Kipchirchir y Timothy Kiptanui, mientras que los estadounidenses Allen Johnson y Tim Mack confirmaron su favoritismo en los 110 vallas con 13.16 y en pértiga con 5,80.

En disco, el campeón olímpico, el lituano Virgilijus Alekna, se impuso con un registro de 68,12 metros, claramente por debajo de su mejor marca del año, de 70,97, y fue el único de los vencedores que acusó y reconoció su cansancio por lo largo de la temporada.

«Todo estuvo bien, el viento, el clima. El único problema es que la temporada ha sido muy larga», comentó Alenkna, quien precedió en la clasificación final al español Mario Pestano, segundo con 66,69.

Alekna fue evasivo a la hora de responder acerca del húngaro Robert Fazekas, descalificado por dopaje en los Olímpicos de Atenas donde había ocupado originalmente el primer lugar.

«*Fazekas? Un rival del pasado», se limitó a decir Alenkna cuando le dijeron que le decía ahora el nombre del húngaro.

La Reunión de Berlín, que volvió este año al remodelado Estadio Olímpico, estuvo enmarcada por la despedida de la ex-campeona mundial y olímpica de salto de longitud Heike Drechsler y el ganador de la medalla de plata en decatlón an Atlanta, Fran Busemann, a quien se le dedicó una carrera especial de 1.500 metros.