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El presunto pandillero haitiano Amaral Ducloná, extraditado anoche a Francia, será juzgado por la justicia de ese país por el rapto, secuestro y asesinato de un funcionario consular, que cumplía su misión en Cabo Haitiano, informó hoy la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Ducloná, quien se ampara en República Dominicana bajo el nombre de Julicoeur Berthone, fue sacado del país a las 20:05 de la noche en el vuelo 495 de Air France, con destino a París, escoltado por varios oficiales de la Policía Nacional de Francia, quienes lo recibieron en el Aeropuerto Internacional las Américas (AILA). Los oficiales llegaron al AILA anoche mismo, en el mismo avión en que fue montado Ducloná, en cual fue llevado a la Terminal por miembros del departamento de Investigaciones Especiales de la DNCD, quienes previamente lo pusieron en manos de funcionarios de la embajada de Francia.
El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, dijo este viernes que el imputado fue trasladado de la cárcel de Najayo a la sede del organismo antinarcóticos, donde fue mantenido hasta las 5:45 de la tarde del jueves, hora a la que partió la comitiva encabezada por un coronel del Ejército.
Ducloná fue apresado el 8 de septiembre en La Romana de 2009. Se le acusa del secuestro y posterior asesinato del cónsul francés Claude Bernard, mientras en Puerto Príncipe es sindicado como autor de la muerte de un oficial canadiense, asignado a la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah).
Es descrito por las propias autoridades haitianas, según pruebas entregadas por el propio presidente René Preval, como un peligroso pandillero que operaba en el empobrecido barrio Cité Soleil, en Puerto Príncipe, donde se mantienen los remanentes de su agrupación. Haití avaló su extradición a Francia, dijo Lebrón.
La entrega del extranjero fue ordenada por la Suprema Corte de Justicia (SCJ), atendiendo un recursos interpuesto por la Procuraduría General de la República, a partir de la solicitud de extradición encaminada por la Fiscalía de París. Ducloná negaba en todo momento ser la persona reclamada por Francia.
