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En el populoso sector de Cristo Rey, la salud tiene nombre de hombre: Antonio Cruz Jiminián, un doctor reconocido por mezclar sus conocimientos médicos con el amor y la solidaridad. En ocasión del Día Mundial de la Salud, ¡Vivir! conversó con él sobre su rol profesional.
Aunque su clínica está ubicada en esa barriada, muchas son las personas de diferentes puntos de la capital que se trasladan hasta allá en busca de la atención personal que el mismo Antonito, como también se le llama, ofrece a todos sin importar su credo, raza, color de piel y menos aún su condición económica.
Su consultorio es totalmente atípico, aunque es el presidente de la fundación Cruz Jiminián y director de la clínica que lleva el mismo nombre, aún utiliza una camilla que él mismo se construyó, en la que hace 28 años acostó a su primer paciente, en esa camilla acosté a la primera persona que atendí y le agradezco tanto que nunca la he cambiado, ni pienso hacerlo, dijo el galeno mientras nos mostraba orgulloso su vieja cama.
Comparte su consultorio con otros 15 doctores, quienes han dividido el reducido espacio en pequeños cubículos y comparten su pasión por ayudar a los demás.
El doctor Cruz Jiminián dice que prefiere estar en un consultorio sin lujos y hasta cierto punto humilde, pero ofrecer a sus pacientes una atención de salud lujosa.
Su paga. Su esfuerzo es básicamente recompensado por la confianza del enfermo. A la hora de nuestra llegada a su centro médico, que fue durante las horas de la mañana, ya había pasado visita a unos ochenta pacientes y su consultorio estaba repleto de personas en espera para ser atendidas.
La salud hoy. Al ser cuestionado sobre la calidad de la salud de hoy en día, Cruz Jiminián sostuvo que el gran problema del sector es la parte económica, la pérdida del valor humano y la falta de sensibilidad de muchos médicos.
El problema de la salud en el país es que muchos doctores han dejado de identificarse con los problemas de salud, principalmente de los más pobres, y se han aferrado al beneficio económico, afirma.
La frase
Antonio Cruz Jiminián
Estudié Medicina porque quise ser sacerdote, y creo que la medicina es lo más parecido, en ambas hay que solidarizarse con el prójimo.
Para salvar vidas
El Día Mundial de la Salud, que se celebra el 7 de abril, se centrará este año en la seguridad de los establecimientos de salud y la preparación del personal sanitario que atiende a los afectados por situaciones de emergencia. Los centros de salud y el personal sanitario, de vital importancia para la población vulnerable en caso de desastre, son fundamentales para tratar lesiones, prevenir enfermedades y atender las necesidades sanitarias de la población.
