El reverendo Domingo Paulino Moya, presidente del Ministerio Jesús es Sanidad y Vida Eterna, pidió hoy al gobierno dominicano reconocer que tiene una deuda histórica acumulada con la comunidad evangélica del país, ya que ésta ha sido víctima de discriminación en lo relacionado con la distribución de las riquezas nacionales que administra el Estado.
Paulino Moya fue enfático al afirmar que la Iglesia católica en el país es la más favorecida con los bienes públicos en detrimento de las confesiones evangélicas dominicanas, cuyo crecimiento en feligreses ya alcanza un 35 por ciento de la población dominicana la cual, cumple con el pago de los impuestos y desarrolla una gran labor social, moral y espiritual que no ha sido valorada en su justa dimension por los gobiernos dominicanos.
El lider cívico evangélico sostuvo que reconoce que el presidente Danilo Medina ha realizado aportes limitados a este importante segmento de la sociedad dominicana, pero que eso no se corresponde con el crecimiento y los aportes de este sector, que sin el apoyo que recibe la iglesia oficial, despliega una magna labor que beneficia incluso la estabilidad democratica nacional y la paz social.
“Algunos altos funcionarios del Estado, lamentablemente no valoran la incidencia y la labor que realiza la comunidad evangélica dominicana”, anotó el religioso.
Concluyó solicitando al mandatario disponer un aumento en los aportes que dispone el Gobierno a favor del pastorado evangélico y sus entidades sociales, e instruir a los ministros y directores generales de instituciones, a dar un trato de mayor aprecio y valoración a las iglesias y organizaciones evangélicas, a fin de que éstas puedan continuar con mayor facilidad su tarea de bien común.