Todo el país está conteste que el doctor Francisco Domínguez Brito realizó un buen trabajo al frente del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Pero el trabajo que hizo Domínguez Brito al rescatar, por ejemplo, áreas del Parque Nacional Valle Nuevo que ocupaban empresarios depredadores, fue echado hacia atrás por el señor Àngel Estévez, quien lo reemplazó en el cargo, al permitir nuevas ocupaciones en la zona; así como aceptar plantaciones de aguacate en el Parque Nacional Sierra de Bahoruco.

Domínguez Brito es abogado y tuvo un buen desempeño. Ahora bien, personas han cuestionado la designación del licenciado Orlando Jorge Mera como ministro de Medio Ambiente por su condición de abogado.

Ocurre que Jorge Mera viene de realizar excelente papel como delegado político del PRM ante la Junta Central Electoral, demostrando gallardía y coraje, que es lo que necesita para enfrentar los depredadores de las áreas boscosas del país.

Además, de gallardía y coraje, Jorge Mera deberá rodearse de técnicos calificados que los hay, como el agrónomo José Manuel Mateo Feliz, encargado de Biodiversidad del Ministerio, a quien conocemos desde la década del 90, cuando laboramos juntos en la Dirección Nacional de Parques, lo que es hoy el Ministerio Medio Ambiente, nosotros fungíamos como asesor de relaciones públicas de los directores de Parques arquitectos Manuel Valverde Podestá y Cristian Martínez Villanueva.

Con las agallas exhibidas por Orlando Jorge Mera, sólo tendrá que ejecutar los planes y proyectos que elaboren los técnicos, ya que ningún incumbente de organismos elabora planes, sino que ejecuta. Por tal razón, no son válidos los argumentos que esgrimen algunos de que, por ser abogado, descalifican al recién designado ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales.